Todo lo que debe saber sobre la toxicidad del hierro

Mientras que la anemia ferropénica es una de las deficiencias nutricionales de las que más se habla en el mundo, los efectos adversos del exceso de hierro pasan prácticamente desapercibidos. Sin embargo, si nos atenemos a las estadísticas, la toxicidad por hierro es una de las principales causas de muerte por envenenamiento en niños menores de 6 años. Los adultos también pueden sufrir una sobrecarga de hierro si toman suplementos en exceso o padecen trastornos como la hemocromatosis.

Cuando el hierro absorbido por el organismo alcanza niveles tóxicos, puede afectar a la salud de forma importante. Aquí está todo lo que necesita saber sobre la toxicidad del hierro, sus causas y síntomas, y las formas de revertirla.

Una sobredosis de suplementos de hierro puede causar intoxicación aguda por hierro

La toxicidad por hierro suele ser el resultado de consumir suplementos de hierro en exceso. Por lo general, los suplementos de hierro en forma de multivitamínicos no contienen suficiente hierro para causar una sobredosis en adultos y los multivitamínicos para niños tienen dosis muy bajas de hierro. Sin embargo, es posible sufrir una intoxicación aguda por hierro a partir de pastillas de hierro puro. Más frecuente en niños que en adultos, una sobredosis accidental de jarabes de hierro puede hacer que el hierro del organismo aumente hasta niveles tóxicos.

Los síntomas menores de una intoxicación aguda por hierro incluyen pulso rápido pero débil, mareos, piel pálida, dolor de estómago, náuseas, diarrea, heces negras y sabor metálico en la boca. Estos síntomas duran unas 6 horas, pero pueden reaparecer al cabo de 12 a 48 horas. Si el paciente no recibe tratamiento inmediato, la toxicidad puede provocar shock, fallos orgánicos múltiples e incluso la muerte.

Para evitar una sobredosis, asegúrese de mantener los suplementos de hierro fuera del alcance de los niños. Asimismo, evite dar suplementos de hierro no recetados a los niños. Además, no tome dosis adicionales al mismo tiempo, aunque esté intentando compensar una dosis olvidada.

La toxicidad por hierro podría deberse a una hemocromatosis

La hemocromatosis es una enfermedad en la que el organismo absorbe más hierro del necesario, lo que provoca una acumulación tóxica de hierro. Sin tratamiento, esta afección puede provocar problemas como cáncer de hígado, cirrosis hepática y cardiopatías.

Aunque la hemocromatosis es en gran medida genética, puede padecer anemia hereditaria (como anemia sideroblástica, anemia hemolítica, deficiencia de piruvato quinasa, talasemia intermedia y talasemia mayor), ya que el intestino absorbe un exceso de hierro para satisfacer la creciente necesidad del organismo de formar nuevos glóbulos rojos. Como el organismo no puede excretar el exceso de hierro, se produce toxicidad férrica.

Los síntomas de la hemocromatosis incluyen un cambio en el color de la piel, dolor en las articulaciones, problemas digestivos, problemas cardíacos y glándulas pituitaria y tiroidea hipoactivas. Pero a veces la hemocromatosis también puede causar algunos efectos secundarios graves y complicaciones como

Fibrosis
Cirrosis hepática
Diabetes
Ictericia prolongada
Insuficiencia cardiaca
Insuficiencia de los órganos reproductores
Daños cerebrales
Mayor riesgo de cáncer

Evite la toxicidad por hierro controlando su dieta

La toxicidad o intoxicación por hierro requiere una intervención médica inmediata. Pero hay algunas cosas que puede hacer para evitar una sobrecarga, especialmente si la toxicidad se debe a una afección hereditaria. Si experimenta toxicidad, evite los alimentos ricos en hierro, como la carne roja, y reduzca el alcohol y los alimentos azucarados, que favorecen la absorción del hierro. Sin embargo, algunos alimentos pueden reducir la absorción de hierro por el organismo.

Consuma alimentos ricos en calcio, como leche, col rizada y soja, ya que el calcio dificulta la absorción del hierro.

Beba té negro, infusiones, café y cacao con las comidas, ya que se cree que son potentes inhibidores de la absorción de hierro.

Coma frutas y verduras frescas, incluidas las espinacas y la col rizada. Aunque contienen hierro, también contienen fibra y antioxidantes. Mientras que la fibra reduce la absorción del hierro, los antioxidantes combaten los radicales libres que desencadena el exceso de hierro. También contienen oxalato, que reduce la absorción del hierro.

Coma nueces, granos y frijoles ya que estos son altos en fibra además de otros nutrientes.

Evite la toxicidad previniendo la interacción con otros medicamentos

Si necesita tomar suplementos de hierro y está tomando medicación para otras afecciones, consulte a su médico para saber si los suplementos de hierro son seguros para usted. Por ejemplo, la medicación para la gota tiende a aumentar el almacenamiento de hierro en el hígado. Por tanto, antes de tomar suplementos, identifique y evite cualquier posible interacción farmacológica.

Para detectar la toxicidad del hierro, compruebe sus niveles séricos de ferritina

El cuerpo almacena hierro en forma de ferritina, una proteína estructural. Un nivel elevado de ferritina puede significar que tiene niveles tóxicos de hierro en el organismo. Por ello, se recomienda realizar un análisis de los niveles de ferritina para diagnosticar la sobrecarga de hierro. Sin embargo, tenga en cuenta que el diagnóstico de toxicidad por hierro mediante el examen de los niveles de ferritina puede no ser exacto si la sobrecarga de hierro es el resultado de una enfermedad hepática alcohólica. Por eso es posible que también le pidan que se haga una prueba de la función hepática. También se aconseja una prueba de saturación de la transferrina sérica, en la que se mide la cantidad de hierro unido a la proteína transferrina en la sangre. Un valor alto de saturación de transferrina indica un exceso de hierro en el organismo.

Un diagnóstico precoz, la medicación adecuada y algunos cambios en la dieta le ayudarán a superar los efectos tóxicos de los niveles elevados de hierro en sangre.