Rituales que no son buenos para la vagina
Cuidar tus partes femeninas es tan importante como cuidar tu piel. Cuando te exfolias, hidratas y comes los alimentos adecuados para mantener la salud de tu piel, ¿has pensado en cuidar tu vagina de la misma manera?
La vagina es una parte delicada del cuerpo y requiere una atención especial para mantenerla limpia. Propensa a las infecciones, es importante mantener la vagina y sus alrededores limpios e higiénicos.
He aquí algunas cosas que la mayoría de las mujeres hacen mal cuando se trata de mantener la vagina limpia y sana.
Rituales de limpieza que no son buenos para la vagina
Tus partes femeninas son tan importantes como cualquier otra parte del cuerpo para mantener un cuerpo sano. Aquí hay algunas maneras en que las mujeres están cuidando la vagina incorrectamente. Si usted está haciendo cualquiera de estos a su vagina, asegúrese de detenerlo inmediatamente.
Frotarse
Cuando te duchas, siempre es importante ser suave con tu vagina. Está bien frotarse la piel con una esponja vegetal o con jabón, pero no es lo mismo cuando se trata de la vagina.
No es necesario frotar la vagina porque la piel es muy sensible. Frotarla sólo provocará dolor e irritación más adelante. También puede provocar sequedad. Por lo tanto, evita frotar por completo. En su lugar, lava suavemente la vagina y la zona circundante.
Uso de jabones perfumados
Si utilizas jabones perfumados u otros productos perfumados para que tu vagina huela mejor, debes dejar de hacerlo inmediatamente. El uso de productos perfumados altera el equilibrio natural de la vagina, especialmente el entorno ácido o pH de la vagina. El equilibrio normal del pH de la vagina es de 4,5 o menos. Esto impide el crecimiento de microorganismos no deseados.
Lavar la vagina con agua y jabón común es todo lo que necesitas para mantenerla limpia y sana. Es normal que tengas olor ahí abajo, que puede cambiar con el ciclo menstrual. Sin embargo, si notas que tu vagina desprende un olor inusual, debes consultar a un médico para conocer la causa.
Duchas vaginales
Las duchas vaginales consisten en limpiar o lavar el interior de la vagina con agua o una mezcla de otros líquidos. Los médicos recomiendan no utilizar duchas vaginales. Las duchas vaginales pueden alterar el crecimiento de las bacterias y la acidez natural de una vagina sana.
Una vagina sana tiene bacterias buenas y malas. Este equilibrio mantiene el entorno vaginal ácido, lo que mantiene a raya las infecciones. Las duchas vaginales pueden hacer que crezcan bacterias nocivas, alterando el equilibrio. Esto puede provocar más problemas de salud.
Por lo tanto, evita las duchas vaginales y lávate la vagina con suavidad.
Limpiar con demasiada frecuencia
Si tienes la costumbre de limpiarte la vagina con demasiada frecuencia, debes saber que te está haciendo más mal que bien. Lo mejor es dejar que la vagina se limpie sola, porque así es como la naturaleza pretende que lo haga. Produce mucosidad que elimina la sangre, el semen y el flujo vaginal no deseado.
Puedes utilizar un paño limpio para mantener higiénica la parte exterior de la vagina. No tienes que preocuparte por el interior, ya que se limpia solo.
Exfoliante
Es importante exfoliar la piel para eliminar las células muertas que aparecen. Sin embargo, no ocurre lo mismo con la piel de la vagina y sus alrededores.
Exfoliar, al igual que fregar, puede causar irritación y enrojecimiento. Si notas la piel seca alrededor de la región vaginal, consulta a un médico antes de tratarla por tu cuenta. El médico puede recetarte lubricantes e hidratantes vaginales a base de agua que pueden reducir la irritación causada por la sequedad.
Por lo tanto, habla abiertamente con tu médico sobre los síntomas que tienes antes de autotratarte.
Afeitarse
La mayoría de las mujeres consideran que el vello púbico es antihigiénico y vergonzoso. También existe la idea errónea de que afeitarse el vello alrededor de la vagina con regularidad significa que la vagina y la zona que la rodea están limpias. Sin embargo, esto no es cierto.
En realidad, el vello púbico protege la vagina de las infecciones. Por lo tanto, afeitarlo puede hacer que tu vagina sea más susceptible a varios tipos de infecciones.
Si prefieres afeitarte el vello púbico, asegúrate de cambiar la cuchilla con regularidad para evitar que el vello se enquiste y cause irritación. Además, tómate tu tiempo para afeitarte la zona, no querrás tener cortes ahí abajo.
Ahora que ya sabes lo que no debes hacer, aquí tienes algunas cosas que puedes hacer para mantener la vagina limpia e higiénica.
Maneras inofensivas de mantener limpia la vagina
La mejor forma de mantener la vagina limpia y libre de olores es utilizar agua y jabón.
Asegúrate de ducharte al menos una vez al día.
Utiliza ropa interior limpia, absorbente y bien ventilada. Evita llevar ropa que pueda aumentar la transpiración, como la ropa interior de nailon.
Durante la menstruación, lávate las manos antes de colocarte los tampones para asegurarte de que no introduces ninguna bacteria.
No utilices tampones para absorber secreciones vaginales no menstruales.