Riesgos para la salud asociados al consumo de carne de cerdo

La carne de cerdo se consume en distintas partes del mundo, ya sea en forma de carne roja propiamente dicha o de carne procesada. Los productos procesados del cerdo, como el beicon, el salami, las salchichas y los perritos calientes, son populares por su facilidad de preparación y comodidad.

Aunque estos productos derivados del cerdo se utilizan desde hace varios años, existen varios riesgos sanitarios asociados a su consumo debido a la forma en que se manipulan o incluso se cocinan. El cerdo infectado puede suponer una grave amenaza para la salud y debe consumirse con moderación o evitarse. Por lo demás, cocinarlo bien es una buena forma de eliminar las bacterias y virus que transporta.

Riesgos para la salud asociados al consumo de cerdo

He aquí algunas razones que pueden hacer que quiera evitar comer carne de cerdo:

Triquinosis

La ascáride Trichinella spiralis puede infectar a los animales, incluidos los cerdos. Comer carne cruda o poco hecha de estos animales infectados puede causar triquinosis. La carne infectada contiene gusanos inmaduros o quistes de triquina que se convierten en ascárides adultos en el intestino que se multiplican y entran en el torrente sanguíneo. Estos gusanos pueden afectar al corazón, los pulmones, el cerebro y el diafragma.

La triquinosis puede causar debilidad o dolor muscular, fiebre, diarrea, problemas cardíacos y calambres. Al comer carne de cerdo, hay que asegurarse de que esté bien cocinada para evitar problemas de salud, ya que en casos graves la triquinosis también puede provocar la muerte. Además, ahumar, salar y secar la carne de cerdo no mata a los gusanos.

Hepatitis E

La hepatitis E es una enfermedad del hígado causada por el virus de la hepatitis E. Los cerdos pueden ser portadores de esta enfermedad. Los cerdos pueden ser portadores de este virus, y comer carne poco hecha o cruda de un animal infectado puede provocar graves problemas de salud en los seres humanos. Los síntomas de la infección por hepatitis E incluyen pérdida de apetito, náuseas, cansancio, fiebre, orina oscura o ictericia.

Los alimentos que contienen hígado de cerdo crudo pueden albergar el virus de la hepatitis E. Las mujeres embarazadas deben tener cuidado, ya que el consumo de carne de cerdo infectada puede tener complicaciones graves, incluso la muerte de la madre y el feto.

Cáncer

La carne procesada se conserva mediante ahumado o salazón, lo que puede dar lugar a la formación de carcinógenos y, a su vez, provocar el desarrollo de cáncer. La carne roja, como la de cerdo, está relacionada con el cáncer colorrectal o intestinal, ya que contiene un compuesto llamado hierro hemo que puede dañar el revestimiento del colon. Además, la carne procesada y el consumo de carne roja también están asociados al cáncer de páncreas.

Para reducir el riesgo de cáncer, limite su consumo de productos derivados del cerdo a 500 gramos por semana.

Enfermedades cardiacas

Además de aumentar tu peso, las grasas saturadas tienen efectos negativos sobre la salud de tu corazón. Aumentan los niveles de colesterol «malo» en el organismo, lo que incrementa el riesgo de padecer enfermedades cardiacas.

La carne procesada, como las salchichas o el beicon, es más perjudicial que la carne roja, ya que contiene más cantidad de grasas saturadas y suele freírse para su consumo. Si ya corre el riesgo de padecer enfermedades cardiacas o tiene antecedentes, intente evitar por completo los productos derivados del cerdo.