Remedios sencillos y naturales para el síndrome del ojo seco

El síndrome del ojo seco es una afección común que afecta a muchas personas en todo el mundo. Quienes pasan muchas horas delante de un portátil, un ordenador o un smartphone corren el riesgo de contraer este trastorno. La gente no suele tomarse en serio esta afección e ignora los síntomas. Si no se proporciona el tratamiento adecuado, puede incluso provocar ceguera permanente. Esta afección afecta sobre todo a las mujeres, que padecen sequedad ocular debido a los cambios hormonales asociados a la menopausia.

En términos médicos, esta afección se denomina queratoconjuntivitis seca. El síndrome del ojo seco afecta a más del 60% de la población mundial, incluidos los niños. La falta de lubricación en los ojos es la principal causa de esta afección, que provoca sequedad, inflamación, enrojecimiento, visión borrosa e incluso pérdida permanente de visión. Es absolutamente necesaria una intervención médica adecuada. He aquí algunos remedios caseros eficaces para tratar la sequedad ocular.

Omega-3

Una cantidad insuficiente de ácidos grasos, especialmente omega-3, en la dieta puede provocar sequedad ocular. Los ácidos grasos omega-3 ayudan a reducir la inflamación del organismo, favorecen la producción de lágrimas y mejoran su calidad. Los omega 3 son un componente importante de las moléculas de grasa, que mantienen los ojos sanos. Un estudio publicado en el International Journal of Ophthalmology demuestra que los omega 3 desempeñan un papel importante para garantizar la salud ocular y prevenir el síndrome del ojo seco. Consumir una dieta que incluya omega 3 puede garantizar unos ojos sanos. Los alimentos marinos como el salmón, el caviar, la caballa, el arenque, la anchoa, las sardinas y las ostras contienen altos niveles de ácidos grasos omega 3. Otros alimentos ricos en omega 3 son las espinacas, la soja, las nueces, las almendras, las semillas de chía y el aceite de semillas de lino.

Aceite de ricino

El aceite de ricino es un remedio eficaz para tratar los síntomas de la sequedad ocular. Contiene ácido ricinoleico, que es un agente antiinflamatorio que alivia el picor, la irritación, el ardor y el dolor asociados al síndrome del ojo seco, y ayuda a reducir la evaporación de las lágrimas. Asegúrese de comprar aceite de ricino puro, ecológico y sin hexano. Con un gotero, introduzca una gota de aceite de ricino en cada ojo dos veces al día para hidratar los ojos y reducir el enrojecimiento.

Un estudio informa de que las gotas oftálmicas de aceite de ricino son eficaces y seguras para tratar la disfunción de las glándulas de Meibomio, una de las principales causas de la sequedad ocular. El estudio demostró que las gotas oftálmicas de ricino mejoran la estabilidad de las lágrimas gracias a la dispersión de lípidos, la prevención de la evaporación de las lágrimas y el efecto lubricante del aceite. En otro estudio, los investigadores descubrieron que la emulsión de aceite de ricino y agua era eficaz para reducir la evaporación de las lágrimas.

Lavado regular de los ojos

Los ojos secos causan irritación, lo que obliga a frotarse los ojos enérgicamente. Hay que evitar frotarse los ojos constantemente para reducir la inflamación. Mantener una higiene ocular adecuada ayuda a aliviar esta molestia. Lavarse los ojos a intervalos regulares mantiene los ojos húmedos y elimina cualquier resto de polvo o suciedad que pueda causar irritación e infecciones. Ponga unas gotas de champú para bebés o jabón suave en las yemas limpias de los dedos. Cierra los ojos y masajea suavemente los párpados cerca de la base de las pestañas durante un minuto. A continuación, aclare el jabón de los párpados con agua tibia. Hacer esto dos veces al día puede ayudar a aliviar los síntomas que acompañan al síndrome del ojo seco.

Gel de aloe vera

El gel de aloe vera es un remedio casero eficaz para los ojos secos, gracias a su naturaleza alcalina, su propiedad hidratante y su efecto antiinflamatorio, que ayudan a reducir el enrojecimiento, la hinchazón y la inflamación. El gel puede extraerse fácilmente o incluso comprarse en una tienda. Primero, enjuague una hoja de aloe vera y extraiga el gel. Aplique un poco de este gel en un trozo de pañuelo facial y páselo suavemente por la parte exterior de los párpados. Déjalo actuar durante 10 minutos y acláralo con agua tibia. Repita este procedimiento dos o tres veces al día. Pero no dejes que el gel penetre en los ojos.

Aceite de coco

El aceite de coco es un excelente agente hidratante para los ojos y desempeña un papel fundamental en la reducción de los síntomas de la sequedad ocular. Su riqueza en ácidos grasos forma una capa protectora sobre las capas de la película lagrimal que ayuda a evitar la evaporación de las lágrimas. Sus cualidades antiinflamatorias ayudan a reducir las molestias causadas por la sequedad ocular. Un estudio concluye que el aceite de coco virgen actúa como un colirio rehumectante seguro y no muestra grandes diferencias en el parámetro medible en comparación con los colirios de marca de venta libre y la solución salina. Con un trozo de algodón estéril, empapa unas gotas de aceite de coco. Cierre los ojos y coloque el algodón sobre los párpados cerrados durante 15 minutos. El uso regular de esta técnica proporcionará alivio y ayudará a tratar la afección.

Compresas calientes

Una compresa caliente puede hacer maravillas en los ojos. Dado que esta afección se caracteriza por la falta de humedad, una compresa caliente puede ayudar a recuperar esa humedad perdida. En primer lugar, empapa un paño limpio en agua caliente (no más de 40 grados centígrados) y exprime el exceso de agua. Coloque el paño húmedo y caliente sobre los párpados cerrados durante 10 minutos. Una vez que el calor y la humedad disminuyan, vuelva a empapar el paño en agua caliente y repita el procedimiento. Por último, aclara los ojos con agua tibia.

También puedes utilizar leche en lugar de agua. La leche contiene muchas enzimas que pueden calmar y relajar los músculos oculares. Utilice un trozo de algodón estéril y sumérjalo en leche fría. Coloca el algodón húmedo sobre los párpados cerrados y déjalo actuar durante 10 minutos. Añade unas gotas de agua de rosas a la leche para mejorar los resultados.

Pepino frío

El pepino es famoso por su efecto refrescante, tanto si se come como si se coloca sobre los ojos. Es popular entre dietistas y esteticistas. Colocar una rodaja de pepino sobre cada ojo ayuda a aliviar la tensión. Alivia los músculos oculares cansados y elimina el exceso de calor. El pepino rejuvenece el funcionamiento del sistema circulatorio, mejorando así el flujo sanguíneo. Pica un par de rodajas de pepino y colócalas sobre los ojos para tratar el síndrome del ojo seco.

Ejercicio de parpadeo

Parpadear con frecuencia mejora el flujo de lágrimas, que ayudan a humedecer los ojos. También reparte las lágrimas por las comisuras de los ojos, lo que reduce los síntomas de la sequedad ocular, mejora la circulación sanguínea en los ojos y reduce la tensión ocular. Cada vez que parpadeas, las lágrimas arrastran las partículas de suciedad y aportan nutrientes que mantienen sana la superficie de los ojos. Las personas que trabajan con ordenadores y portátiles parpadean con menos frecuencia y miran constantemente las pantallas, lo que provoca sequedad ocular. Un sencillo ejercicio de parpadeo en tres pasos, mencionado aquí, puede garantizar la salud ocular a largo plazo. En primer lugar, cierra suavemente los ojos y cuenta hasta dos. A continuación, aprieta los párpados y cuenta hasta dos. Por último, abre los ojos y cuenta hasta dos. Este ejercicio lava los ojos por completo y los repone con una nueva capa de lágrimas.

Agua de rosas

El agua de rosas también es un remedio eficaz para tratar la sequedad ocular. Relaja los ojos tensos y cansados de forma natural y elimina cualquier partícula que pueda causar daños en los ojos. También aumenta el flujo lagrimal sobre los ojos y lubrica el globo ocular. La carencia de vitamina A también puede provocar sequedad ocular. Como el agua de rosas tiene un alto contenido en vitamina A, ayuda a restaurar la humedad de los ojos. La vitamina A protege los ojos de los radicales libres, las toxinas, los alérgenos y la inflamación. Desempeña un papel importante en la producción de la capa de mucina, la capa lubricante más interna de la película lagrimal que es crucial para una película lagrimal sana. Empapa un trozo de algodón estéril en agua de rosas, aplícalo suavemente sobre los párpados cerrados y déjalo actuar durante 10 minutos. Repítalo dos o tres veces al día para obtener mejores resultados. También puede enjuagarse los ojos con agua de rosas pura o utilizar gotas de agua de rosas pura.

Masaje ocular

Masajear una zona de nuestro cuerpo ayuda a aliviar el estrés y mejora la circulación sanguínea. Lo mismo ocurre con los ojos. Estimule las glándulas lagrimales masajeando suavemente el párpado. Así se favorece la secreción lagrimal y se evita la sequedad ocular. Un suave masaje ocular puede relajar los músculos que rodean los ojos y mejorar la circulación sanguínea en los mismos. Ponga un par de gotas de aceite de oliva o de coco en las yemas de los dedos. Masajear suavemente sobre los párpados cerrados durante unos dos minutos. El aceite será absorbido por los párpados y aliviará los ojos.