Razones por las que se sienten náuseas después de comer
Las náuseas pueden aparecer en los momentos más inoportunos y causar estragos en tu día. Te hacen sentir incómodo e inquieto. ¿Y lo peor? Siempre es difícil determinar la causa exacta.
Pero, si te has estado sintiendo mareado después de cada comida tuya, hay algunas cosas que podrían estar en juego. Aquí hay siete razones por las que has estado sintiendo náuseas después de comer.
Intoxicación alimentaria
Si síntomas como dolor de estómago, diarrea, debilidad, fiebre, escalofríos, sudoración y dolor de cabeza acompañan a la sensación de náuseas, es posible que tengas una intoxicación alimentaria. Puedes contraer esta enfermedad por comer alimentos contaminados por bacterias, virus, productos químicos o metales venenosos como el plomo o el cadmio.
La contaminación cruzada y el almacenamiento inadecuado de los alimentos también pueden provocar una intoxicación alimentaria. La mayoría de los síntomas comienzan 24 horas después de haber comido algo contaminado. Sin embargo, los alimentos contaminados con bacterias estafilocócicas suelen presentar síntomas entre 1 y 8 horas después de haber comido. Si sospechas de una intoxicación alimentaria, acude a un médico lo antes posible.
Úlcera de estómago
Si tienes náuseas leves acompañadas de un dolor sordo o ardiente en el estómago, podrías tener una úlcera estomacal. Está causada por bacterias, ciertos medicamentos y el cáncer.
Si te sientes débil, tienes dificultad para respirar, sangre en el vómito o en las heces, o un dolor de estómago que no desaparece, debes acudir al médico inmediatamente.
Reflujo gastroesofágico
El reflujo gastroesofágico (RGE) o reflujo ácido provoca acidez y dolor en el pecho, justo detrás del esternón. La forma más fácil de saber si se padece reflujo ácido es si se percibe el sabor de la comida o el ácido del estómago en la parte posterior de la garganta después de comer.
Además de las náuseas, el reflujo gastroesofágico conlleva mal aliento y problemas respiratorios. Puede deberse al embarazo, al sobrepeso o a la obesidad. Ciertos medicamentos y el tabaquismo también pueden causar reflujo ácido. Si empiezas a vomitar mucho, tienes problemas para tragar o tienes sangre en el vómito, debes acudir a un médico inmediatamente.
Cálculos biliares
Las náuseas leves acompañadas de un dolor en la esquina superior derecha del abdomen (que dura 30 minutos o más) son signos de cálculos biliares. Otros síntomas de esta enfermedad son el dolor bajo el omóplato derecho y la indigestión después de comer alimentos ricos en grasas o proteínas.
Los cálculos biliares se producen cuando las sustancias de la bilis (en la vesícula biliar) se endurecen. Esto ocurre cuando el hígado libera demasiado colesterol en el cuerpo y no hay suficientes sales biliares para disolverlo. También puede producirse cuando otras sustancias presentes en la bilis hacen que el colesterol se cristalice o cuando la bilis se concentra porque la vesícula no se vacía lo suficiente.
La obesidad, la diabetes, el embarazo y la pérdida rápida de peso pueden ponerle en riesgo de padecer cálculos biliares. Si tienes dolor abdominal que dura más de 5 horas, heces de color arcilla, fiebre o vómitos, debes consultar a un profesional médico inmediatamente.
Estrés por calor
Las afecciones relacionadas con el calor pueden ser graves, pero no se les presta toda la atención que deberían. Si ha estado expuesto a temperaturas elevadas y se siente con náuseas, mareado, sediento y confuso, es posible que esté sufriendo un golpe de calor.
El estrés por calor también puede ir acompañado de calambres por calor, insolación y agotamiento por calor. Cada una de estas condiciones requiere atención médica, por lo que es importante buscar ayuda si usted o un ser querido está pasando por alguno de estos síntomas.
Síndrome de vómitos cíclicos
Si experimenta náuseas graves, vómitos y agotamiento físico sin ninguna causa evidente, entonces podría estar sufriendo el síndrome de vómitos cíclicos. El estrés emocional, la ansiedad, los ataques de pánico, las infecciones, ciertos alimentos (cafeína, lácteos o frutos secos), el clima caluroso, los periodos menstruales, el agotamiento físico o el exceso de ejercicio pueden causar esta condición.
Si experimenta sequedad de garganta, micción infrecuente, piel seca, letargo, fiebre y ojos hundidos, consulte a un médico lo antes posible.
Embarazo
El embarazo es tal vez lo primero que nos viene a la mente cuando se trata de náuseas y vómitos. Y, en efecto, las estadísticas afirman que el 70-80% de las mujeres embarazadas experimentan estos síntomas.
Aunque la causa de las «náuseas matutinas» no está del todo clara, las investigaciones afirman que podrían deberse al reflujo gastroesofágico. Unos simples cambios en la dieta y la medicación oral pueden ayudar a aliviar los síntomas.
Aunque la causa exacta de las náuseas suele ser difícil de determinar, siempre puedes tomar nota de otros síntomas que te ayuden a diagnosticar el problema. Y, aunque en la mayoría de los casos no hay que preocuparse, si experimentas náuseas durante mucho tiempo, consulta a un médico lo antes posible.