Razones por las que deberías añadir plátanos a tus copos de avena

Los copos de avena son uno de los desayunos más apreciados en todo el mundo. A pesar de ser rica en fibra dietética y nutrientes, la harina de avena aún se puede retocar con frutas como el plátano para mejorar aún más su valor nutricional. En cuanto al contenido nutricional de un plátano, uno solo contiene unas 105 calorías con un alto contenido en fibra, cobre, manganeso, potasio, vitaminas B y C y antioxidantes. Estas son las razones por las que añadir plátanos maduros a tu desayuno es la mejor manera de empezar el día.

Son súper saciantes y nutritivos

Tanto los plátanos maduros como la avena contienen fibra que te llena después de consumirlos. Además, si sufres frecuentes episodios de estreñimiento, tomar al menos un plátano al día puede aliviarlo. Al estar llenos de carbohidratos, son un tentempié saludable para tomar después de una sesión de ejercicio o si simplemente tienes hambre o estás intentando perder peso.

Protegen tu salud cardiovascular

Los plátanos tienen un alto contenido en potasio, un mineral muy importante que regula varios procesos corporales. Puede reducir la hipertensión y prevenir la retención de sodio y agua en el organismo. Los investigadores también han demostrado que consumir fuentes dietéticas de potasio y antioxidantes es una de las mejores maneras de reducir el riesgo de enfermedades cardiacas y accidentes cerebrovasculares. La fibra del plátano también previene la acumulación de placa en las arterias y evita la arteriosclerosis.

Fortalece tu sistema óseo

Al estar cargado de potasio, ayuda a prevenir los dolorosos calambres musculares en las personas que tienen regímenes de entrenamiento intensos. Los estudios han demostrado que tomar plátanos como tentempié antes o después del entrenamiento puede reducir las posibilidades de sufrir calambres musculares. Su consumo diario también puede prevenir enfermedades degenerativas de las articulaciones como la artritis y la gota, especialmente porque contienen muchos antioxidantes.

Regula el funcionamiento normal de los riñones

Estudios a largo plazo han demostrado que la ingesta diaria de plátanos puede mantener los riñones en buen estado de salud previniendo la formación de cálculos, así como aumentando la frecuencia y el volumen de orina. Esto se debe principalmente a su alto contenido en potasio y diversos antioxidantes.

Previene las enfermedades degenerativas del ojo

Como muchas frutas ricas en vitaminas, el plátano es excelente para restaurar la salud de los ojos. Se ha demostrado que es bueno para la visión y previene enfermedades degenerativas como la degeneración macular, las cataratas, la ceguera nocturna y el glaucoma.

Mantén en orden tu sistema digestivo

Un intestino feliz desempeña un papel fundamental a la hora de marcar el tono del día. Tomar frutas ricas en fibra, como los plátanos, con las gachas de avena ayuda de varias maneras. Al ser fácilmente digeribles, estimulan los movimientos intestinales regulares y eliminan los desechos corporales, lo que es especialmente beneficioso para las personas que sufren de almorranas. Esto significa una mejor digestión y una mejor eliminación, lo que conduce a una salud digestiva general. Si sufres de un caso grave de úlcera estomacal o malestar gastrointestinal, comer plátanos puede estimular la curación del intestino al tiempo que reduce la acidez.

Es importante tener en cuenta que en personas con una alta resistencia a la insulina tomar plátanos solos puede disparar los niveles de azúcar en sangre, pero cuando se combinan con avena, este efecto disminuye. Esta atractiva fruta amarilla es abundante en nutrientes que, combinados con un cereal saludable como la avena, multiplican sus beneficios. Aunque no puedas mezclarlos con avena, proponte comer un plátano al día.