Por qué la atención quiropráctica puede ser una solución eficaz para las migrañas
En algún momento, la mayoría de las personas han experimentado dolores de cabeza o migrañas que les dejan indefensos y abatidos. Los dolores de cabeza pueden variar de una persona a otra, tanto por el tipo como por la zona afectada, y suelen estar determinados por sus causas subyacentes. Pero la mayoría de los dolores de cabeza, incluidas las migrañas, se producen por una razón; sin embargo, puede haber tantos desencadenantes que puede ser difícil concretar una causa específica.
Algunos de los desencadenantes generales van desde el estrés, la medicación, dormir poco o demasiado, los cambios meteorológicos y hormonales hasta la ingesta de diversos alimentos y bebidas, así como otros factores externos. De todos los tipos de cefaleas, las migrañas pueden ser las peores. También conocidas como cefaleas espinales, las migrañas se producen debido a problemas con los nervios que salen a nivel de la columna vertebral cuando se subluxa un hueso en el cuello.
¿Qué son las migrañas?
Las migrañas se transmiten genéticamente y se producen por náuseas y sensibilidad a la luz o al ruido. Una migraña puede describirse como un dolor de cabeza intenso y punzante que puede durar desde unas horas hasta unos días. Puede sufrir un ataque de migraña varias veces al mes o una vez al año, pero en la mayoría de los casos tiende a ser menos grave con la edad.
Si tienes predisposición a sufrir migrañas, lo más probable es que sufras tu primer ataque antes de cumplir los 30 años. También tendrá un sistema nervioso más sensible. Para tratar las migrañas, también es importante saber que existen dos tipos principales.
Tipos de migrañas
Migraña sin aura
Son migrañas que se producen sin previo aviso y suelen ser dolores de cabeza pulsátiles de moderados a intensos en un lado de la cabeza. Pueden estar provocadas por una serie de factores desencadenantes como náuseas, cambios de humor, visión borrosa, fatiga y confusión. Suelen durar entre 4 y 72 horas, y se producen de unas pocas veces a la semana a unas pocas veces al año.
Migraña con aura
La migraña con aura provoca alteraciones visuales y otros síntomas neurológicos que comienzan antes del dolor de cabeza propiamente dicho y suelen remitir en una hora. Los sistemas de aura inducen debilidad muscular en un lado del cuerpo, sensaciones de hormigueo en la cara y las manos, falta de atención y confusión general incluso al hablar. Estos síntomas a veces no van acompañados de dolor de cabeza.
Tratamiento de la migraña con cuidados quiroprácticos
Tal vez se pregunte cómo una visita al quiropráctico puede ayudar a tratar los dolores de cabeza. Los quiroprácticos se centran en el diagnóstico y tratamiento de los trastornos neuromusculares, haciendo hincapié en el tratamiento mediante el ajuste manual y/o la manipulación de la columna vertebral. Dado que las migrañas están directamente relacionadas con la columna vertebral, un quiropráctico puede ayudarle a aliviar los síntomas de una migraña.
Si ha sufrido migrañas, sabrá que estos dolores de cabeza también provocan tensiones musculares alrededor del cuello, la parte superior de la espalda y los hombros. Otras causas de estas tensiones pueden ser patrones de respiración inadecuados, malas posturas o largas horas sentado frente al ordenador.
Uno de los medios más eficaces para aliviar los síntomas tanto de los dolores de cabeza como de las migrañas es mejorar notablemente la postura, lo que puede conseguirse mediante ajustes quiroprácticos. El cuidado quiropráctico estabiliza la tensión muscular y restablece el movimiento aliviando a los contribuyentes al estrés. Esto ayuda a reducir la presión en y alrededor del cuello y la columna vertebral.
El cuidado quiropráctico se concentra en restaurar la respiración adecuada y la postura óptima a través de métodos naturales, maniobrando la columna vertebral, las caderas y las costillas. Al devolver a la columna su alineación natural y reforzar el control muscular, el tratamiento quiropráctico puede ayudar a reducir sus dolores de cabeza. Si lo ha probado todo y sigue sin poder reducir sus migrañas, una visita al quiropráctico puede ser justo lo que está buscando.