Maneras en que el estrés envía señales cuando empiezas a enfermar

¿Se pone usted enfermo con demasiada frecuencia? Un trabajo ajetreado, los problemas familiares, las limitaciones económicas y las amistades rotas son suficientes para causar mucho estrés a una persona por lo demás alegre. El estrés crónico puede afectar a nuestra salud de numerosas maneras e incluso puede hacer que caigamos enfermos sin ninguna otra razón. Si experimenta una o más de las siguientes señales de estrés, significa que podría enfermar pronto. Siga leyendo para conocer las diez señales que da su cuerpo cuando ha empezado a enfermar debido al estrés.

Dolor en el cerebro

El estrés puede hacer que tus hormonas liberen una serie de eventos neuroquímicos en tu cerebro, que estimularán los nervios y harán que tus vasos sanguíneos se hinchen. Esto crea una tensión en el cerebro que da lugar a dolores de cabeza y migrañas.

Agitación y ardor de estómago

El estrés puede causar problemas digestivos como la alteración de la función intestinal, acidez, gases e hinchazón, e incluso calambres y diarrea. Si te sientes ansioso y estresado y de repente tu estómago se siente como un revoltijo de náuseas, podría ser una señal de que te estás enfermando debido a todos los días estresantes que estás pasando.

Estornudar demasiado

Si estornudas desde hace mucho tiempo y ese resfriado se parece mucho al estrés de la gripe, es posible que tu sistema inmunitario se esté debilitando más que nunca. Con el estrés, nuestra inmunidad baja, y muchas veces nos deja infectados con el virus del resfriado.

Insomnio

Por supuesto, el estrés puede hacer que des vueltas en la cama y que te quedes despierto como un búho. Los problemas de sueño son los más comunes en las personas que se estresan mucho. La irritación, la ansiedad y la pérdida de concentración pueden dejarle sin sueño y hacer que le resulte difícil dormir durante días seguidos.

Aumentar los kilos

Cuando tu cuerpo entiende que te enfrentas a situaciones estresantes, automáticamente libera adrenalina y cortisol asumiendo que necesitas energía física para protegerte. Estas hormonas desencadenan la sensación de hambre y acabas comiendo muchas grasas y carbohidratos. Como resultado, empiezas a ganar peso fácilmente. Por lo tanto, se ha demostrado que el estrés provoca un aumento de peso.

Terribles dolores de espalda

El estrés puede desencadenar que el sistema nervioso simpático reduzca el flujo sanguíneo a tus músculos y te haga propenso a sufrir espasmos musculares. Cuando el estrés empeora, algunas personas incluso tienden a encorvarse y tensar los músculos de los hombros y el cuello cuando se sienten ansiosos. Estas tendencias suelen agravar los problemas de espalda.

Acné y brotes

Cuando te asustas más, tu piel también brota. El estrés puede afectar a los niveles de la hormona andrógeno en el cuerpo, que hace que las glándulas sebáceas produzcan más grasa. Esto provoca la aparición de granos y la obstrucción de los poros. El estrés también puede estimular las terminaciones nerviosas y hacer que la piel se inflame, provocando eczemas y psoriasis.

Los cortes y rasguños no se curan

Se ha descubierto que el estrés puede hacer que esas heridas tarden más en curarse. Si no quieres que esas antiestéticas marcas permanezcan en tu cuerpo durante mucho tiempo, sería prudente que no te relajaras con demasiada frecuencia. De hecho, si te estresas demasiado, las heridas pueden tardar unos nueve días más que la media en curarse por completo.

Olvidar incluso los nombres de tus hijos

Se ha descubierto que el estrés libera la hormona cortisol, y los niveles altos de cortisol en la sangre pueden perjudicar temporalmente la capacidad de recordar información conocida. Se ha demostrado que el estrés crónico incluso daña las células del cerebro, afectando en gran medida a tu memoria.

Incapacidad para concebir

El estrés puede afectar a todos los sistemas orgánicos del cuerpo, incluido el sistema reproductivo. Cuanto más deprimida esté una mujer, menos probabilidades tendrá de concebir un bebé. El estrés también puede afectar a la fertilidad. Cuando pruebas técnicas de relajación y formas de afrontar el estrés, aumentas automáticamente tus posibilidades de quedarte embarazada.

Afrontar bien el estrés puede convertirte en una persona más sana y feliz. Por lo tanto, intenta sobrellevar el estrés y llevar una vida mejor que ahogarte en la miseria.