Las bebidas energéticas podrían estar dañando tu corazón

Las bebidas energéticas suelen considerarse la mejor opción para aumentar el estado de alerta. Como los fabricantes de bebidas energéticas son listos con sus técnicas de marketing, estas bebidas energéticas han conseguido hacerse un hueco entre los jóvenes. Hoy en día, después de las multivitaminas, las bebidas energéticas son el suplemento dietético más popular entre adolescentes y adultos jóvenes. Pero, estas bebidas energéticas pueden causar efectos peligrosos en tu cuerpo debido a la naturaleza de sus ingredientes.

Por qué son malas las bebidas energéticas

El principal ingrediente de una bebida energética es la cafeína. Por ejemplo, una bebida energética de 700 mililitros puede contener hasta 500 mg de cafeína. Esto equivale a la cantidad de cafeína de cuatro o cinco tazas de café. Además, a las bebidas energéticas se les añade guaraná, que contiene cafeína. Además de la cafeína, el azúcar que contienen también es perjudicial para el organismo. La mayoría de las bebidas energéticas contienen entre 25 y 50 gramos de azúcares simples. Estos azúcares pueden absorberse rápidamente y pasar a formar parte del torrente sanguíneo con facilidad. Otra tendencia entre los jóvenes es mezclar las bebidas energéticas con alcohol. Esta es una de las peores combinaciones que podrías darle a tu cuerpo. Por todo ello, se ha observado un aumento de las visitas a urgencias y muertes asociadas a las bebidas energéticas.

Efectos de las bebidas energéticas en el corazón

¿Todavía no estás listo para deshacerte de tu bebida energética favorita? Entonces, esta investigación es para usted. Según un estudio publicado en la revista Journal of the American Heart Association, las bebidas energéticas afectan al organismo más que otras bebidas con cafeína. La investigación descubrió que una bebida energética comercial tenía más impacto en la actividad eléctrica del corazón y en la tensión arterial que una bebida de control con la misma cantidad de cafeína.

Para el estudio de investigación, se dividió a 18 personas en dos grupos. El primer grupo consumió 1 litro de una bebida energética comercial que contenía 320 mg de cafeína. Al segundo grupo se le dio una bebida de control que contenía la misma cantidad de cafeína. Tras un periodo de lavado de seis días, se pidió a los participantes que cambiaran de bebida. Se observaron las actividades eléctricas de sus corazones. Se comprobó que ambas bebidas producían un aumento similar de la presión arterial sistólica. Sin embargo, al cabo de seis horas, las presiones sistólicas del grupo de la cafeína casi habían vuelto a sus lecturas originales. Al mismo tiempo, el grupo de las bebidas energéticas registró una presión arterial ligeramente elevada incluso después de seis horas. Esto demuestra que la cafeína no es la única culpable. Otros ingredientes de las bebidas energéticas también pueden alterar la tensión arterial. Otro hallazgo es que también pueden aumentar los latidos del corazón.

Esto demuestra que las bebidas energéticas no tienen el mismo efecto que el café o los refrescos. Quienes padezcan hipertensión, alguna afección cardiaca u otros problemas de salud deben evitar estas bebidas energéticas. Podrían aumentar el riesgo de infarto e ictus. Los altos niveles de cafeína de las bebidas energéticas también pueden provocar palpitaciones, deshidratación y ansiedad. El consumo excesivo de estas bebidas puede contribuir a problemas de sueño en los adolescentes. Si eres diabético o prediabético, estas bebidas enriquecidas con azúcar pueden jugar en tu contra. Si no puedes dejar de consumir bebidas energéticas de golpe, al menos ten precaución al consumirlas.

La próxima vez que tengas ganas de echar mano de tu bebida energética, busca otras alternativas. El café es una buena opción para superar el bajón de media tarde. No te preocupes por el contenido de cafeína. El café con moderación no causa ningún daño a tu cuerpo. El té verde es otra opción saludable. Con menos cafeína y grandes beneficios para la salud, podría estimular tu mente y tu cuerpo. O prueba zumos o batidos verdes saludables. Siempre que necesites un empujoncito de energía, asegúrate de elegir una opción saludable.