Hormonas que provocan el aumento de peso y cómo controlarlas

¿Pérdida de peso en mente? Centre su atención en las hormonas, las moléculas más poderosas del organismo. Estos mensajeros químicos controlan todos los procesos y funciones. A menudo, también están detrás de la razón por la que parece que no puedes deshacerte de esos kilos.

Esto no significa que las calorías no sean importantes. Se pierde peso cuando se queman más calorías de las que se ingieren, pero esto es sólo una parte de la ecuación. Sin unas hormonas equilibradas, es más probable que mantengas o recuperes el peso.

Recuerda que las hormonas regulan procesos como el metabolismo, el apetito y el crecimiento de las células grasas. Así que, ¿por qué no tenerlas en cuenta? Si observas el panorama general, podrás abordar la pérdida de peso desde todos los ángulos.

1. La grelina: La hormona del hambre

La grelina se encarga del apetito. Su secreción aumenta justo antes de las comidas, ¡así que puedes darle las gracias por ese estómago gruñón! También actúa en la vía de recompensa de la dopamina del cerebro, lo que explica por qué la comida puede parecer un premio.

El problema empieza cuando la grelina se descontrola. El estrés, la falta de sueño y la inactividad física pueden aumentar sus niveles. Esto demuestra el impacto de los hábitos de vida.

2. Cortisol: La hormona del estrés

Cuando estás ansioso o estresado, los niveles de cortisol se disparan. Esta «hormona del estrés» activa la lipoproteína lipasa, la enzima que convierte los triglicéridos en ácidos grasos libres. Con más ácidos grasos libres, la insulina no puede descomponer la grasa correctamente. Hola, ¡aumento de peso!

El cortisol también hace que te resulte difícil diferenciar entre hambre y emoción. A su vez, serás más propenso a comer tus sentimientos.

3. Estrógeno: La hormona sexual femenina

El estrógeno es lo que te convierte en mujer. También se sabe que rebota durante «ese momento del mes». Sin embargo, si el baile hormonal continúa, el aumento de peso está asegurado.

Cuando el estrógeno es demasiado alto, florecen unas células grasas llamadas adipocitos. Es una reacción que se relaciona con los lácteos y la carne, ambos a menudo llenos de antibióticos y hormonas. No es de extrañar que un consumo elevado se asocie a un exceso de estrógenos.

Cómo controlar las hormonas del aumento de peso

1. Controlar el estrés

Aliviar el estrés es una de las mejores maneras de controlar estas hormonas del aumento de peso. Dedica tiempo a cosas que te hagan sentir bien, ya sea un hobby o el yoga. Evita los desestresantes poco saludables, como fumar cigarrillos o beber demasiado. Recuerda que el estrés puede ser un estado de ánimo, pero sus efectos físicos son poderosos.

2. Descansa lo suficiente

El sueño y el peso van de la mano. Si no duermes lo suficiente, aumentarán tanto la grelina como el cortisol. Haz un favor a tus hormonas y descansa entre 7 y 8 horas cada noche.

3. Mantente físicamente activo

El ejercicio tiene demasiados beneficios. Reduce el estrés, regula el sueño y, lo que es más importante, estabiliza las hormonas. Los adultos deberían hacer al menos 30 minutos de ejercicio 5 días a la semana.

4. Sigue una dieta basada en plantas

Las frutas, las verduras y los cereales integrales no sólo aportan nutrientes al cuerpo. También mantienen el estrógeno a raya. Pero esto no significa que tengas que ser vegetariana. Si comes productos lácteos y carne, cómpralos a granjeros locales que no utilicen hormonas, antibióticos ni organismos modificados genéticamente (OMG).

Cuando hayas perdido peso, no abandones estos hábitos. Adoptarlos de por vida es la clave del equilibrio hormonal a largo plazo.