Formas de mejorar su deseo sexual cuando está deprimido

Cuando pensamos en la depresión, sabemos que hay cambios emocionales y de humor que pueden hacernos la vida difícil. Además, también hay otros síntomas físicos que acompañan a la depresión, como el aumento o la pérdida de peso, la irritabilidad, el cambio en los hábitos de sueño y apetito y la pérdida de energía, entre otros síntomas. Uno de los principales efectos de la depresión, aunque del que menos se habla, es la pérdida de libido o deseo sexual, y en una sociedad que hace del sexo un tema tabú, hablar de la pérdida de deseo sexual en la depresión puede ser realmente estresante. Una cosa importante que también hay que recordar es que si bien hay pérdida de la libido debido a la depresión, los medicamentos pueden hacer que la pérdida de la libido aún peor. Esto significa que es posible que no tenga ningún deseo de tener relaciones sexuales, e incluso cuando se esfuerza por tener intimidad, puede ser menos satisfactorio y alcanzar el orgasmo puede parecer casi imposible. Puede parecer realmente difícil controlar la pérdida del deseo sexual junto con los demás síntomas debilitantes de la depresión, pero siempre hay que ir paso a paso cuando se trata de curar la depresión. A continuación se presentan algunas formas pequeñas y manejables en las que puede lidiar con la pérdida de la libido durante la depresión.

Céntrese en la depresión

Es tentador intentar salvar tu vida sexual y no centrarte tanto en la depresión, pero esto acaba siendo contraproducente al final. Por ejemplo, las personas pueden saber que los medicamentos para la depresión pueden afectar drásticamente a su vida sexual y acaban optando por no tomar la medicación para evitarlo. Esto no sólo empeora la depresión, sino que también puede afectar drásticamente a su salud mental a largo plazo. Es importante abordar todos los síntomas que vienen con la depresión, el deseo sexual incluido, pero la depresión es la primera y más importante cuestión a tratar. Una vez que te encuentres mejor mentalmente, podrás empezar a centrarte en las cuestiones relacionadas.

Comparte con tu pareja

En una relación, uno de los miembros puede tener depresión y el otro no, y esto puede suponer una gran tensión en la relación. Cuando las parejas acuden a un terapeuta, se quejan de que la depresión está arruinando su vida sexual y, por tanto, su relación. Sin embargo, no muchas parejas se dan cuenta de que sus patrones de comunicación también pueden estar afectando a su vida sexual. Puede resultar embarazoso para una persona admitir que no quiere tener relaciones sexuales, sobre todo cuando su pareja está intentando reavivar la chispa, y esto puede hacer que las personas se sientan incómodas a la hora de compartirlo. La sinceridad y la comunicación abierta son especialmente importantes en este momento porque ayudan a lograr una intimidad más profunda. Una vez lograda la intimidad emocional, puede ser más fácil llegar juntos a la intimidad física. Hable con su pareja de sus preocupaciones, temores y miedos. Esto también ayuda a su pareja a comprender mejor por lo que está pasando y puede facilitar que ambos aborden juntos la depresión.

Busca distintas formas de disfrutar del sexo

El sexo no tiene por qué ser siempre con penetración. Hay muchas otras formas de disfrutar del sexo juntos, como centrarse por completo en los preliminares o hacer que todo sea sexo oral. Una de las principales cosas que pueden disuadir a una persona deprimida es el esfuerzo que tiene que hacer para tener relaciones sexuales, y puede parecer abrumador apartar la depresión y centrarse en complacer a la pareja. Hay muchas cosas relacionadas con el sexo, como besarse, los masajes eróticos, la masturbación mutua, el dry humping o incluso los abrazos. Dé prioridad a las cosas que le ayudan a disfrutar de la actividad sexual y céntrese en ellas en lugar de ir siempre a por todas. Esto te ayudará a sentar las bases de una vida sexual mejor mientras te enfrentas a la depresión.

A veces, esfuérzate un poco

Es perfectamente normal no tener relaciones sexuales cuando te sientes muy deprimido, pero a veces, puede convertirse en un hábito decir que no en lugar de tratar de alejar la depresión. Es muy importante que nunca te fuerces a hacer algo que no quieres, pero puede que te sorprenda poder disfrutar de una actividad a pesar de pensar que no lo harías. Mucha gente ha declarado disfrutar del sexo en mitad de una sesión después de darse cuenta de que el sexo puede ser realmente divertido. Es fácil olvidar las cosas que te gustaban hacer cuando estás sumido en la depresión, así que a veces presionarte puede recordarte lo mucho que realmente disfrutabas del sexo.

Hable con su médico sobre la medicación

La medicación puede obstaculizar cualquier progreso sexual que hagas durante la depresión, y podría ser necesario cambiar o suspender la medicación si se interpone en tus esfuerzos. Hable honestamente con su médico sobre el efecto de los antidepresivos, ya que muchos médicos pueden no saber cómo se manifiestan realmente los medicamentos en un individuo. Además, dependiendo de la gravedad de tu enfermedad, puedes buscar otras formas de tratamiento como la terapia, la fitoterapia o la medicina oriental, entre otras opciones.

Sé amable y paciente

Por último, la batalla contra la depresión puede ser larga y dura. Es importante no ser tan duro consigo mismo durante este tiempo y ser paciente con el resultado. Es importante ser amable con uno mismo durante este tiempo. La depresión ya puede hacerte sentir que el mundo es un lugar oscuro y que no vales nada, pero presionarte demasiado para que cambies rápidamente o empieces a sentirte feliz de nuevo puede estancar el proceso en lugar de ayudarlo. Céntrate en mejorar en general, y no sólo en tener una vida sexual mejor. Date tiempo para recuperarte y para hacer cosas que te gusten. Cuando empieces a darte tiempo y espacio para mejorar, empezarás a ver un cambio positivo en general.