Formas de afrontar el miedo y superarlo
¿Sabías que el miedo es en realidad un acrónimo? Para muchos es «olvídalo todo y huye», mientras que para unos pocos es «enfréntate a todo y levántate». Sin embargo, como la mayoría de las cosas en la vida, depende de nosotros elegir la forma en que definimos nuestros miedos. Muchos de nosotros seguimos eludiendo nuestro verdadero potencial porque nos paraliza el miedo al fracaso y al aislamiento, pero las personas que sobresalen no se definen por ese miedo.
Por otra parte, hay muchas personas que se esfuerzan por romper las cadenas del miedo. Se convierten en pioneros de la vida en sus respectivas funciones. Acabamos leyendo sobre ellos a menudo, pero nuestra ansiedad derivada del miedo nos limita a la hora de perseguir la excelencia.
Formas de afrontar el miedo y superarlo
Hay que tener valor para asumir los propios miedos. Al igual que cualquier emoción de alegría, envidia y tristeza, el miedo también es muy normal. Pero no está bien dejarse dominar por cualquier emoción. He aquí algunas formas viables de enfrentarse al miedo y superarlo en el día a día.
Reconocerlo y aceptarlo
Cuando el miedo ataca, la adrenalina se dispara en el cuerpo. Esto hace que tengas que elegir entre huir o quedarte paralizado por él. Sólo unas pocas personas eligen luchar contra el miedo. En este momento, aunque tu cuerpo esté desbocado lo mejor que puedes hacer es respirar profundamente. Con cada inhalación y exhalación, visualízate más grande que lo que te asusta.
La práctica diaria de la meditación puede fortalecer tu poder mental y aumentar tu claridad. Practica esto cada vez que te sientas ansioso debido al miedo y poco a poco verás que ya no estás tan limitado por él. No huyas del miedo porque eso es cobardía y te dejará para siempre incapaz de elevarte por encima de él.
Conviértelo en tu entrenador vital
Al otro lado del miedo está tu destino. Muchas veces, las cosas que más tememos son precisamente las que debemos hacer para salir adelante. En el proceso de superar el miedo, estamos cruzando obstáculos que creíamos demasiado grandes. Di que sí al menos a una cosa que te dé miedo cada semana. Esto no significa que debas recurrir a la violencia, como la explotación y el vandalismo.
El miedo puede muchas veces impedirnos ser imprudentes con nuestra vida y con la de los demás. Sin embargo, el miedo que te está limitando para convertirte en una versión auténtica de ti mismo debería dirigirse a motivarte.
No dejes que el miedo te utilice
Tendemos a crear asociaciones a partir de personas, lugares e incidentes que desencadenan ciertas emociones. El miedo también puede estar vinculado a un acontecimiento pasado de pérdida o trauma. Es natural lamentar la pérdida y tener miedo de la situación que la causó. Pero si sientes que eres incapaz de superar el incidente por miedo al futuro, tienes que afrontarlo.
El miedo hace que la mente se forme pensamientos estereotipados sobre la raza, la cultura, el sexo, la religión y mucho más. Comprende que tienes que dar una oportunidad a la vida en lugar de confiar en tu propia retrospectiva. El miedo intenso engendra odio y cobardía, ambos equipajes emocionales. Descárgatelos o te agotarán.
Ábrete a la incertidumbre
Muchos de nosotros tenemos miedo al futuro y así es precisamente como empieza la ansiedad. Es casi seguro que, en gran medida, el futuro sigue siendo desconocido. Pero, sin duda, puedes asegurarte de que, independientemente de lo impredecible que vaya a ser el futuro, no te verás afectado por él.
Practica el minimalismo en tu estilo de vida y la compasión con todo el mundo para que mañana, cuando te encuentres con algo para lo que no estabas preparado, puedas seguir siendo tú mismo.
Registra en un diario cómo el miedo te cambió para mejor
Al igual que en cualquier viaje de recuperación, la vida antes y después del miedo será drásticamente diferente. Es importante anotar cómo cambió tu interior como persona cuando decidiste enfrentarte a tus miedos. Escribe en un diario lo que te enseñó el miedo y cómo hiciste las paces con él. Comparte tus lecciones con el mundo y seguro que será un rayo de esperanza en la vida de otra persona.
En última instancia, enfrentarte a tus miedos es lo que debes hacer para cumplir tu propósito en la vida. Considéralo un empujón del universo para ser valiente y resistente. Una vez que lo hayas superado, experimentarás un sentimiento inquebrantable de empoderamiento como persona.