¿Es un hígado sano el secreto de una buena piel?
El maquillaje puede ayudar a fingir una piel perfecta, pero nada puede acercarse a tener una piel naturalmente impecable. Hoy en día, cada vez más personas empiezan a darse cuenta de que prestar más atención a su dieta es crucial para conseguir una piel perfecta. La mayoría de los alimentos ecológicos tienen un precio elevado, pero eso no impide que la gente los compre con la esperanza de que les ayuden a conseguir una piel radiante. Aunque mantenerse sano es, sin duda, una gran manera de conseguir una piel saludable, hay un órgano en particular que puede desempeñar un papel decisivo en la salud de tu piel.
¿Qué hace el hígado?
El hígado es el principal órgano de desintoxicación del cuerpo. Cada día, su cuerpo entra en contacto con toxinas nocivas en los alimentos que ingiere. Si se permitiera que estas toxinas recorrieran su cuerpo sin control, causarían graves daños. El hígado es el órgano responsable de filtrar estas toxinas y hacerlas inofensivas. Si te alimentas bien y llevas un estilo de vida saludable, tu hígado también funcionará de forma óptima. Sin embargo, si bebes en exceso y vives a base de comida basura, tu hígado se enfrentará a una sobrecarga tóxica.
¿Qué significa esto para la piel? Tu piel es un reflejo directo de tu salud interior. Si tu hígado no es capaz de filtrar todas las toxinas de forma eficaz, sus efectos negativos se manifestarán en tu piel. Por ello, los especialistas en salud siempre recomiendan centrarse en la salud de forma holística si se quiere mejorar la piel. Si tu hígado está sobrecargado de toxinas, entonces vas a empezar a ver brotes de acné, envejecimiento prematuro, opacidad y flacidez en tu piel.
Los efectos de un hígado poco saludable en su piel
Un hígado sano normal convierte las toxinas en sustancias inofensivas. Sin embargo, cuando no puede hacer su trabajo correctamente, las toxinas no se descomponen completamente y siguen siendo muy dañinas. La mayoría de las veces, si el hígado no las filtra, acaban siendo purgadas a través de los poros. Si tienes un acné severo o puntos negros, esto podría deberse a que las toxinas no están siendo eliminadas por tu hígado. La inflamación y la hinchazón también pueden ser causadas por un hígado sobrecargado.
Otra forma en que la salud del hígado puede afectar a la piel es a través de la descomposición de la grasa. El hígado desempeña un papel importante en la descomposición de las grasas para convertirlas en compuestos utilizables. Cuando el hígado está demasiado congestionado de toxinas, es incapaz de descomponer las grasas adecuadamente. Para asumir parte de la carga, la piel interviene e intenta descomponer la grasa. Pero como la descomposición de la grasa no es el trabajo principal de la piel, la distrae de otras funciones cruciales. La regulación del sebo es una de las tareas más importantes de la piel y ayuda a regular los niveles naturales de humedad de la piel. Si tu piel no es capaz de regularlo, puede provocar una sobreproducción de sebo. El exceso de sebo cargado de toxinas se extiende por toda la piel, convirtiéndola en una candidata principal para el acné.
Cómo mantener el hígado sano
Mantener el hígado sano no es una ciencia espacial. En la mayoría de los casos, mientras lleves un estilo de vida saludable, tu hígado debería estar en excelentes condiciones de funcionamiento. Pero, ¿qué constituye exactamente un estilo de vida saludable? Lo primero que hay que hacer para recuperar la salud del hígado es moderar o eliminar el consumo de alcohol. El alcohol es lo peor que puede encontrar su hígado porque es esencialmente un veneno. Dejar de consumir alcohol por completo, al menos durante un periodo de tiempo determinado, es siempre la forma más eficaz de ayudar a tu hígado a recuperarse. Pero si la atracción de la cerveza es demasiado fuerte para resistirla, puedes intentar reducir la cantidad que bebes. Intenta no beber más de una copa a la semana si quieres empezar a ver una mejora en tu piel.