Enfermedades graves sobre las que su médico puede estar equivocado

Cuando se enfrenta a una avalancha de síntomas médicos que surgen misteriosamente de la nada, espera que su médico pueda arrojar algo de luz sobre el asunto. Desgraciadamente, a los médicos les suele costar identificar signos preocupantes como problemas estomacales, erupciones cutáneas, fiebre y dolores corporales. De hecho, un estudio reciente ha descubierto que los errores de diagnóstico pueden afectar a millones de personas adultas, y que la mitad de esos errores son potencialmente perjudiciales.

¿Por qué?

Muchos síntomas suelen ser tan comunes a múltiples dolencias y enfermedades que a los médicos les resulta difícil determinar el problema exacto. Además, los síntomas pueden variar de una persona a otra, ya que el organismo de cada persona responde de forma diferente a las distintas amenazas para la salud. Por supuesto, se podría argumentar que el objetivo de las pruebas diagnósticas es poder revelar exactamente cuál es el problema, pero la mayoría de nosotros no nos molestamos en hacerlas. E incluso si lo hiciéramos, seguirían sin responder a nuestras ansiosas preguntas en blanco y negro.

Para su información, he aquí 5 de esas delicadas afecciones de salud que pueden diagnosticarse erróneamente con facilidad.

Síndrome del intestino irritable

El síndrome del intestino irritable es una afección crónica del intestino grueso. Los síntomas que se asocian comúnmente con el síndrome del intestino irritable son calambres, dolor abdominal, distensión abdominal, diarrea o estreñimiento.

El síndrome del intestino irritable es una de esas afecciones en las que no existen pruebas reales que puedan demostrar su existencia. En su lugar, requieren un «diagnóstico de eliminación» en el que los médicos descartan otras posibles causas de los síntomas. Según los médicos, el síndrome del intestino irritable sólo puede diagnosticarse con éxito si el paciente presenta síntomas durante al menos seis meses antes de su primera evaluación formal y si experimenta molestias durante al menos tres días al mes durante los últimos tres meses antes de que se le diagnostique la afección.

Fibromialgia

La fibromialgia es un trastorno crónico que provoca síntomas como dolor y sensibilidad en todo el cuerpo. Como este trastorno también se caracteriza por dolor muscular, sensación de ansiedad y cansancio e incapacidad para dormir, muchos médicos pensarán primero que se trata de artritis o síndrome de fatiga crónica. Dado que no existen pruebas de laboratorio que demuestren la existencia de esta afección, el diagnóstico de este problema resulta aún más difícil. El diagnóstico de la fibromialgia también depende en gran medida del tipo de médico que elijas consultar. Por ejemplo, si acude a un gastroenterólogo, es posible que le digan que padece el síndrome del intestino irritable.

Ataque al corazón

Con síntomas aparentemente obvios como una sensación de opresión dolorosa en la zona del pecho, sudores fríos e incapacidad para respirar, puede pensar que diagnosticar un ataque al corazón es bastante fácil. Sin embargo, le sorprendería saber que muchas personas no presentan estos síntomas en absoluto. Los estudios han demostrado que las mujeres no suelen sentir dolor en el pecho durante un infarto. Los hombres, sin embargo, son más propensos a experimentar este síntoma, razón por la cual acaban recibiendo una atención más rápida ante un posible infarto que las mujeres. Cuando los pacientes no informan de todos los signos, los médicos a menudo pueden diagnosticar erróneamente los ataques al corazón como gastritis, cálculos biliares o incluso nerviosismo, mientras que las personas mayores a menudo terminan creyendo que están experimentando acidez estomacal en su lugar.

Enfermedad celíaca

Es muy probable que los pacientes celíacos hayan oído decir que tienen todos los demás problemas menos la capacidad de digerir el gluten. Esto se debe a que los síntomas de la enfermedad celíaca, como dolor abdominal, dolor de cabeza, picor en la piel, dolor en las articulaciones y vómitos, son diferentes en cada paciente. En algunos casos, los síntomas pueden no ser visibles en absoluto. La pérdida de peso, que es otro síntoma frecuente, sólo aparece en la mitad de los pacientes celíacos, mientras que en muchos otros la enfermedad se confunde con el síndrome del intestino irritable. La celiaquía también puede provocar ardor de estómago y reflujo ácido, que pueden achacarse a muchas otras afecciones. Por este motivo, la celiaquía puede tardar hasta una década en diagnosticarse correctamente.

¿La buena noticia? La celiaquía puede confirmarse mediante un análisis de sangre, independientemente de los síntomas, mientras que una endoscopia puede ayudar a determinar los daños causados en el intestino delgado, si los hay.

Cáncer

El cáncer es responsable de casi una de cada cuatro muertes. Sin embargo, acaba diagnosticándose erróneamente en casi el 28 por ciento de los casos, y hasta en el 44 por ciento en el caso de ciertos tipos específicos de cáncer, como el melanoma (un tipo de cáncer de piel), el cáncer de mama, el cáncer ginecológico, el cáncer colorrectal y el cáncer hematológico. El diagnóstico erróneo del cáncer puede deberse a múltiples razones, como una información incompleta de la historia clínica, la falta o fragmentación de la información o la falta de tiempo para evaluar al paciente.