Endometriosis – Diagnóstico y eficacia de la escisión en su tratamiento

La endometriosis es, por desgracia, una enfermedad que afecta a una de las partes más desconocidas de la vida de una mujer, su menstruación. Se trata de un aspecto muy personal e íntimo de la salud de la mujer, sobre todo teniendo en cuenta su relación con la menstruación. Así pues, la endometriosis puede considerarse una enfermedad de la menstruación en la vida de una mujer. La mayoría de las veces no se reconoce, se diagnostica mal y, con mucha frecuencia, se trata mal. Por estas razones, es importante ser defensora de la propia salud. Las pacientes deben sentirse cómodas y no tener miedo de hacer preguntas al médico que las atiende para garantizar un diagnóstico y un tratamiento adecuados.

En cuanto al diagnóstico, existe un amplio consenso en que la única manera de diagnosticar formalmente la endometriosis es mediante laparoscopia. Sin embargo, cuando se trata del tratamiento, hay muchas opciones que una paciente puede considerar. Ante todo, es importante entender que la endometriosis no tiene cura, pero se puede tratar. Esto significa que, aunque no existe una forma definitiva de garantizar que la endometriosis no reaparezca una vez tratada, hay formas eficaces de tratar la enfermedad en sí para aliviar los síntomas y reducir el riesgo de que la enfermedad siga desarrollándose. La cirugía de escisión laparoscópica es el método de referencia.

Aunque existen muchas opciones de tratamiento no quirúrgico, desde enfoques holísticos como cambios en la dieta hasta terapia hormonal en forma de anticonceptivos, la cirugía es la forma más definitiva de tratar la endometriosis. La cirugía se centra en las lesiones endometriósicas propiamente dichas, mientras que los métodos no quirúrgicos tienden a buscar la prevención de los síntomas a corto plazo. Sin embargo, la cirugía no debe realizarse sin la recomendación del ginecólogo o sin la comodidad y el consentimiento de la paciente. Por estas razones y por los misterios que aún rodean la etiología de la endometriosis, es importante que las pacientes comprendan perfectamente la naturaleza de la cirugía a la que se someten, en particular por qué la cirugía de escisión es la técnica preferida.

¿Qué es la cirugía de escisión laparoscópica?

La cirugía de escisión laparoscópica es un procedimiento en el que las lesiones de endometriosis se «recortan» individualmente mediante una ayuda visual laparoscópica. Sigue el modelo del procedimiento de mastectomía utilizado en las operaciones de cáncer de mama, en el que se extirpa todo el tejido dañado y canceroso de la mama. Al igual que la primera, la escisión tiene por objeto extirpar todo el tejido enfermo en su totalidad, a fin de evitar el crecimiento y la propagación futuros del tejido endometriósico, preservando al mismo tiempo el tejido sano que rodea las lesiones extirpadas. Utilizando la laparoscopia para la visualización, los cirujanos pueden navegar por la cavidad abdominal y pélvica y extirpar las lesiones sospechosas de endometriosis utilizando pinzas de escisión en frío. Estas muestras se recogen y se envían a patología para confirmar el alcance de la enfermedad. Esta técnica de escisión laparoscópica es el método preferido de cirugía de la endometriosis por varias razones.

Ventajas de la cirugía de escisión

1. Garantiza la extirpación completa de cada lesión de endometriosis

La primera ventaja de la cirugía de escisión reside en el hecho de que elimina cada lesión de endometriosis sospechosa en su totalidad, lo que no puede decirse de procedimientos como la fulguración y la ablación con láser. La extirpación quirúrgica adecuada de la endometriosis puede considerarse como un iceberg. Aunque parezca muy grande por encima de la superficie del agua, el iceberg sólo tiene un tercio de su tamaño real. La mayor parte de la masa se encuentra bajo la superficie del agua. Una lesión de endometriosis puede considerarse del mismo modo.

Muchos cirujanos practican la «cirugía de la endometriosis», pero sus técnicas sólo eliminan la zona superficial de la enfermedad, dejando la endometriosis que yace debajo prácticamente intacta. Esto aumenta la probabilidad de que los síntomas reaparezcan tras la cirugía, ya que la enfermedad puede volver a crecer y propagarse.

En la cirugía de «escisión profunda», la lesión se extirpa por completo, incluso por debajo de la superficie. Ésta es la única forma de garantizar realmente la extirpación de cada lesión y, por lo tanto, ofrece a los pacientes la mejor oportunidad de aliviar los síntomas y evita la propagación ulterior de la enfermedad.

2. Permite obtener un informe patológico

Otra ventaja de la cirugía de escisión es que conserva la propia lesión, lo que permite el cultivo y estudio de la muestra. Al recoger la lesión, los cirujanos pueden enviar el cultivo a patología, donde otro médico con experiencia puede confirmar si el tejido es positivo para endometriosis, así como su gravedad. Ésta es la única forma de diagnosticar concretamente la endometriosis. Este meticuloso estudio requiere que la endometriosis sospechosa no sólo se extirpe, sino que también se conserve lo mejor posible. La cirugía de «escisión en frío» subraya la importancia de este aspecto. Su objetivo es utilizar un mínimo de electricidad, empleando únicamente altos niveles de calor bajo irrigación copiosa con fines de cauterización (evitar hemorragias), y no para la extirpación de las lesiones en sí.

Otras técnicas de cirugía de la endometriosis, como la fulguración y la ablación con láser, utilizan electricidad y calor para destruir la endometriosis propiamente dicha. Esto puede ser perjudicial para el tejido sano circundante y no elimina por completo la lesión de endometriosis que se encuentra bajo la superficie. Y lo que es más importante, impide recoger la muestra. Por lo tanto, en este tipo de procedimientos no suele obtenerse ningún informe patológico. Por razones personales, la cirugía de la endometriosis no es algo que una paciente quiera repetir. Por lo tanto, es importante ser meticuloso en la elección de la cirugía.

3. Se centra en preservar otros órganos

El último factor que hace que la cirugía de escisión merezca la pena es su capacidad para promover la «cirugía en equipo». La endometriosis puede afectar a diversos órganos, tanto reproductores como no reproductores. Por este motivo, los casos más graves de endometriosis pueden ser una cirugía de varias especialidades. Cada órgano infiltrado debe ser revisado, reparado y preservado según su función y anatomía únicas.

Los urólogos y los especialistas gastrointestinales son algunos de los especialistas más comunes que trabajan bajo la dirección del cirujano ginecológico principal en los casos de endometriosis. El cirujano de endometriosis seguirá operando todos los órganos afectados, pero contar con la referencia de los otros especialistas es muy necesario en casos graves de endometriosis infiltrante profunda. Sin otros especialistas a mano, es posible que el cirujano no esté capacitado para operar dichas zonas y que los órganos no reproductivos afectados queden sin tratar. Al favorecer la reparación, reconstrucción y restauración de los órganos afectados, la cirugía de escisión pone de manifiesto la gran necesidad y utilidad de una dinámica de «cirugía en equipo».

En conclusión

Aunque aún queda mucho por investigar para comprender cómo diagnosticar y tratar adecuadamente la endometriosis, todavía existen opciones de tratamiento eficaces. El control de la natalidad y los enfoques holísticos pueden ser buenas formas a corto plazo de mejorar los síntomas, teniendo en cuenta que lo que funciona mejor para algunos puede no ser tan eficaz para otros. Sin embargo, la cirugía laparoscópica es la única forma definitiva de tratar la endometriosis en sí, siendo la cirugía de escisión una de las más eficaces. Se centra en la extirpación del tejido sospechoso de estar enfermo y de la inflamación, lo que permite al cirujano extirpar por completo cada lesión, conservar la muestra para un informe patológico y utilizar una forma de «cirugía en equipo» que permite la reparación y restauración adecuadas de los órganos no reproductivos afectados.

Aunque la cirugía de escisión se esfuerza por ser muy minuciosa en su forma de tratamiento quirúrgico, es importante señalar que ninguna cirugía garantiza con certeza un alivio total de la endometriosis. Por eso sigue siendo tan importante que se sigan financiando e investigando enfermedades tan poco representadas como la endometriosis. No obstante, es fundamental no perder la esperanza en esta batalla y recordar que existen formas eficaces de tratamiento, siendo la cirugía de escisión el «patrón oro».