Datos asombrosos sobre la miel: El elixir mágico de la curación
El uso de la miel en recetas medicinales se remonta a muchos siglos atrás. La miel cruda es la forma más pura de miel, sin filtrar ni pasteurizar, y contiene todos los nutrientes beneficiosos. La miel comercial se calienta durante su procesamiento para que sea más fácil almacenarla en grandes depósitos comerciales, y pierde muchos nutrientes esenciales en el proceso. La miel cruda, sin embargo, está repleta de numerosas vitaminas y minerales y puede utilizarse con diversos fines medicinales, tanto externa como internamente.
La miel y sus beneficios
La lista de beneficios de la miel es bastante larga. Se ha descubierto que este líquido dorado aumenta la absorción de calcio, incrementa el recuento de hemoglobina, combate el resfriado y los problemas respiratorios, mejora la salud gastrointestinal, ayuda con el estreñimiento, las alergias y la obesidad, proporciona energía instantánea y también suministra al cuerpo humano una gran variedad de nutrientes esenciales. Estos son algunos de los beneficios de la miel
Protege contra bacterias y parásitos
La miel cruda se considera muy eficaz en el tratamiento contra bacterias y parásitos internamente. Contiene antibióticos naturales que matan directamente los microbios. Si la miel cruda se aplica directamente sobre los tejidos infectados, acelera el proceso de curación de los tejidos dañados. El rico contenido de vitaminas, minerales y azúcares trabajan juntos para ayudar en el proceso de curación de las heridas.
Cura las quemaduras
Las bacterias no pueden sobrevivir al poder de la miel, ya que es un potente antibiótico. Cuando la miel se aplica generosamente sobre las quemaduras, enfría la sensación de ardor, alivia el dolor y ayuda a que el proceso de curación sea rápido. Además, las quemaduras tratadas con miel no dejan cicatrices.
Cura el insomnio
Si sufres de insomnio, empieza a beber una taza de leche caliente con una cucharada de miel antes de acostarte. Mejorará tus patrones de sueño y hará maravillas en el tratamiento de tus tendencias insomnes.
Alivio de la hiperactividad
La hiperactividad se desencadena por el consumo de azúcar blanco. Si sustituye todo el azúcar blanco de su comida por miel, obtendrá la energía sin el «pico» y anulará las posibilidades de entrar en un estado de hiperactividad. El azúcar blanco también es altamente estimulante sin ninguna calidad alimentaria.
Cura la tos, el resfriado, el dolor de garganta y la congestión nasal
Mezclar 170 gramos de miel cruda líquida con 55 gramos de glicerina y el zumo de dos limones. Mezclar bien y embotellar firmemente. Tomar 2 cucharaditas de vez en cuando para aliviar la tos. Para el dolor de garganta, tomar una cucharadita de miel y dejar que se derrita en la parte posterior de la boca, gotee por la garganta y ayude a aliviar los tejidos inflamados. Para la congestión nasal, ponga una cucharada de miel en un recipiente con agua hirviendo. Cúbrase la cabeza e inhale los vapores manteniendo una toalla sobre la palangana.
Alivia la fatiga y el estrés
Toma una cucharada de miel y deja que se disuelva en una jarra de agua tibia. Guarda el agua en la nevera y bebe un vaso cuando te sientas fatigado. El sistema digestivo absorbe rápidamente la fructosa y la glucosa de la miel, que también actúa como estabilizador natural. La miel con agua ayuda a calmar los cambios de humor y alivia el estrés. Utiliza un 25% de miel en un vaso de agua y bébetelo para desestresarte.
Trata la mala digestión
Al mezclar miel con vinagre de sidra de manzana en una proporción de 1:1 y diluirlo en agua, actúa como un tónico para tratar la mala digestión, el estreñimiento y también alivia la acidez estomacal. Esta mezcla funciona bien para el dolor en las articulaciones y también, promueve la pérdida de peso.
Trata la conjuntivitis
Cuando sufras de conjuntivitis, toma la misma cantidad de miel y agua tibia. Deja que la mezcla se enfríe y luego, aplícala como loción o baño ocular. Repetir si es necesario.
Limpiador facial natural
Para una limpieza facial profunda, mezcla miel con avena en proporción 1:1, y aplícalo como una mascarilla. Déjala durante 30 minutos hasta que se seque y luego, lávala. Esto ayuda a eliminar el acné y las manchas no deseadas.
Acondicionador capilar
Para conseguir un pelo suave, sedoso y bonito, utiliza miel como acondicionador. Mezcla miel con la misma cantidad de aceite de oliva, aplícalo sobre el cabello, cubre la cabeza con una toalla caliente y déjalo actuar durante 30 minutos. Lávalo con champú después de que la miel y el aceite de oliva hayan penetrado en el cuero cabelludo y el cabello. Sentirás que tu pelo ha ganado su mejor condición.
La miel también es útil para la anemia, actúa como conservante de alimentos, ayuda en la osteoporosis, la migraña y bendice a las personas con una vida más larga. La miel cruda puede volverse granulada con el tiempo, pero eso puede evitarse fácilmente colocando el frasco de miel en un recipiente con agua caliente para que vuelva a estar líquida.
