Cómo manejar la endometriosis con alimentos saludables
Si padece endometriosis, sepa que no está sola. Este trastorno común afecta a 1 de cada 10 mujeres en edad reproductiva y suele aparecer a los 30 o 40 años. En todo el mundo se ha diagnosticado endometriosis a 176 millones de mujeres. Aunque la enfermedad se descubrió por primera vez hace más de 100 años, las causas no se conocen del todo.
Sin embargo, al igual que muchas enfermedades crónicas, la dieta es una parte importante del tratamiento de la endometriosis. Cualquiera que padezca endometriosis será el primero en decirle que se trata de un trastorno doloroso. Por ello, el tratamiento es imprescindible para llevar una vida normal. El tratamiento convencional incluye medicamentos para el dolor, hormonas y cirugía, pero una alimentación correcta y saludable puede limitar la necesidad de medicación.
¿Qué es la endometriosis?
La endometriosis se desarrolla cuando el endometrio, o el tejido que recubre el útero, crece fuera del mismo. Los niveles elevados de estrógeno parecen exacerbar la enfermedad. Esto puede provocar síntomas debilitantes como calambres menstruales intensos, periodos anormales o abundantes y relaciones sexuales dolorosas. Para empeorar las cosas, la infertilidad se desarrolla en el 30-50% de las mujeres diagnosticadas. Ni que decir tiene que la endometriosis puede ser realmente estresante.
El riesgo es mayor en las mujeres que tienen un familiar de primer grado -una madre, hermana o hija- con endometriosis. También es más frecuente en las que dan a luz después de los 30 años, tienen un útero anormal o son de raza blanca. Tampoco hay cura, y los tratamientos actuales no se recomiendan para el tratamiento a largo plazo. Los analgésicos y los medicamentos hormonales no tienen los mejores efectos secundarios. Ahí es donde entra en juego la alimentación.
Consejos de dieta para la endometriosis
1. Consuma grasas Omega-3
La endometriosis se caracteriza por el dolor y la inflamación. En este caso, lo que necesitas es un alimento antiinflamatorio, como las grasas omega-3. Una revisión de 2019 encontró que estos ácidos grasos pueden aliviar los períodos dolorosos que vienen con la endometriosis. Funcionan controlando la forma en que la endometriosis progresa, especialmente en las primeras etapas. Es una razón sólida para disfrutar de los pescados grasos como el salmón y el atún. ¿No te gusta el marisco? Toma suplementos de aceite de pescado en su lugar.
2. Elija frutas, verduras y cereales integrales
Todo el mundo debería comer frutas, verduras y cereales integrales, pero para una mujer con endometriosis es aún más importante. El alto contenido en fibra de estos alimentos puede reducir los niveles de estrógeno. En el caso de los niveles elevados que se observan en la endometriosis, esto podría echar una mano. Las frutas, las verduras y los cereales integrales también nutren el cuerpo, algo imprescindible para cualquier tipo de gestión de la enfermedad.
3. Limitar o evitar la carne roja
Si padece endometriosis, reduzca considerablemente el consumo de carne roja. Según The American Journal of Clinical Nutrition, un consumo elevado se asocia a la inflamación. Sólo empeorará tus síntomas. Consume en su lugar pescado graso o fuentes de proteínas magras como aves sin piel, judías y quinoa.
4. Evite los alimentos procesados
Los alimentos procesados, como las comidas congeladas y los aperitivos de caja, no son lo mejor para la endometriosis. Estos alimentos tienen un alto contenido de azúcar refinado y sal, y contienen más omega-6 que omega-3. Es la receta ideal para la inflamación, según los Archivos de Higiene Industrial y Toxicología. Así que opta por los alimentos integrales siempre que sea posible. Si te gustan los tentempiés dulces o salados, piensa en buscar recetas de versiones saludables. Por ejemplo, los garbanzos asados con especias son un aperitivo crujiente y nutritivo.
5. Evite las grasas trans
En 2020, un estudio publicado en Human Reproduction descubrió que el consumo elevado de grasas trans aumenta el riesgo de endometriosis en un 48%. Sin duda, vale la pena evitarlas si ya tienes el trastorno. Las grasas trans también reducen el colesterol «bueno», aumentan el colesterol «malo» y elevan el riesgo de enfermedades cardíacas y de muerte. Evite alimentos como la margarina, las galletas, las tartas congeladas, la pizza congelada y los aperitivos salados. De nuevo, coma alimentos integrales siempre que sea posible.
Con un poco de control sobre tus hábitos alimentarios, consigue controlar la dolorosa endometriosis. Come bien y vive bien.