Cómo la flotación puede cambiar increíblemente nuestro cerebro
La terapia de flotación ha ganado popularidad recientemente por ser profundamente relajante. También conocida como terapia de privación sensorial, consiste en flotar en agua salada caliente. Estará aislado del mundo y su efecto calmante influirá en el funcionamiento de su organismo. Esta experiencia también deja un impacto increíble en su cerebro. He aquí cómo funciona.
¿Qué es la terapia de privación sensorial?
Durante una terapia de flotación, estarás flotando en una especie de tanque de aislamiento. Se le priva de toda experiencia sensorial. Esta es la mejor manera de tomarse un descanso de su apretada agenda: disminuir o reducir todas las fuentes de estímulos entrantes. La pérdida de salida sensorial resulta en la relajación de su cuerpo. El jacuzzi o tanque de flotación se llenará con agua mezclada con sal de Epsom. La presencia de sal de Epsom o técnicamente sulfato de magnesio da flotabilidad al agua y le mantendrá en la superficie del agua. No necesitas nadar; simplemente flotas. Se flota en agua a la temperatura de la piel, con tapones en los oídos. Como el agua se calienta hasta alcanzar la temperatura de la piel, es posible que no sientas el agua.
Este estado le conducirá a un profundo estado de calma y tranquilidad. Flotar reduce los niveles de cortisol, que es una hormona del estrés. Esto le ayudará a mantener la calma durante el proceso, reduciendo las actividades negativas del organismo. Por lo tanto, es un método eficaz para prevenir el estrés. También aportará mindfulness a tu vida diaria. También podría aliviar el dolor muscular, la depresión, la fatiga y la ansiedad. Aparte de eso, habrá un tremendo efecto en su flujo sanguíneo, que, a su vez, tendrá un efecto productivo en su cuerpo, incluyendo su cerebro. Veamos cómo se hace.
Cómo ayuda la flotación a la salud de su cerebro
Como hemos mencionado antes, la flotación mejora la circulación de todo el cuerpo. De este modo, el oxígeno llega eficazmente a las distintas partes del cuerpo. Con un mejor suministro de sangre, el cerebro también funcionará bien. Esta vasodilatación tiene numerosos efectos. Como sabe, un flujo sanguíneo eficaz puede disminuir la hipertensión, reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso prevenir la disfunción eréctil.
Flotar induce a tu cerebro a una etapa de relajación profunda. Se denomina fase theta, un ritmo más lento de las ondas cerebrales. Durante la flotación, se produce un aumento de las ondas theta en nuestro cerebro. La gente suele experimentarlo cuando practica una mediación intensa. O es similar a la etapa que alcanzamos justo antes de quedarnos dormidos o de despertarnos. Siempre que tu cerebro produce ondas cerebrales theta, te sientes relajado y te aporta felicidad. El aumento de las ondas cerebrales theta también está relacionado con un efecto positivo en la creatividad. En ausencia de estímulos externos, el cerebro se ve obligado a crear sus propios estímulos. Por lo tanto, se le dará bien el pensamiento creativo.
Además, flotar favorece la liberación de endorfinas. ¿Recuerdas la función de las endorfinas de tus clases de ciencias? Son un grupo de hormonas segregadas en el cerebro y el sistema nervioso, con una serie de funciones fisiológicas. Se las conoce como las «sustancias químicas del bienestar» del cerebro. Cuando los niveles de endorfinas suben, nos sentimos menos estresados. Flotar asegura la liberación de endorfinas, aumentando así tu energía positiva. Esto es muy beneficioso para los atletas profesionales, ya que les ayuda a preparar el cerebro para actividades que requieren coordinación visomotora.
Flotar para conseguir una salud cerebral óptima es, sin duda, una buena idea. No tiene efectos secundarios conocidos. Pero puede que no funcione para todo el mundo. Sin embargo, si te sientes ansioso en un tanque de aislamiento o dentro de un pequeño lugar cerrado, es mejor que te mantengas alejado de esto.