Cefaleas sexuales: Síntomas, causas y tratamiento

Cuando pensamos en el sexo, la mayoría de las veces sólo pensamos en el placer que conlleva. Uno hace ejercicio mientras se divierte, lo que hace del sexo una actividad que la mayoría de la gente espera con impaciencia. Sin embargo, para algunas personas el sexo no siempre es la gran experiencia que se pretende. El sexo puede tener muchos efectos secundarios, uno de los cuales son los dolores de cabeza que surgen debido a la actividad sexual. Este fenómeno se conoce como cefalalgia coital y afecta aproximadamente al uno por ciento de la población adulta. Desgraciadamente, para muchos, actúa como un aguafiestas y puede afectar a su capacidad para disfrutar del sexo, e incluso puede contribuir a disminuir el deseo sexual o provocar ansiedad ante las relaciones sexuales. Sin embargo, en la mayoría de los casos no es peligroso en absoluto, y sólo es un efecto secundario molesto.

Tipos

Según Mayo Clinic, las cefaleas sexuales pueden agruparse en dos tipos. Uno es un dolor sordo en la cabeza y el cuello que tiende a intensificarse a medida que aumenta la excitación sexual, y el otro es un dolor de cabeza repentino e intenso que se produce justo antes o en el momento del orgasmo. Para algunas personas, ambos dolores de cabeza pueden combinarse y convertirse en una experiencia global dolorosa. Loyola Medicine ha añadido un tercer tipo de cefalea sexual, que consiste en un dolor de cabeza que se produce después de mantener relaciones sexuales y que puede ir de leve a extremadamente doloroso. El dolor de cabeza empeora cuando el paciente está de pie y disminuye cuando se tumba. La duración de estas cefaleas suele ser de unos minutos, pero también depende de cada persona. Algunas personas tienen dolores de cabeza que duran horas, y a veces incluso días. Para muchas personas, los dolores de cabeza aparecen en racimos a lo largo de unos meses, y luego desaparecen durante un año más o menos. Hasta la mitad de las personas que padecen cefaleas sexuales las tendrán durante un periodo de 6 meses, y algunas personas pueden tener un solo ataque en toda su vida.

Causas

La causa de una cefalea sexual es, como su nombre indica, la actividad sexual. Los dolores de cabeza que aparecen de forma brusca o se van acumulando lentamente se asocian a trastornos de la cefalea y no tienen una afección subyacente que pueda ser motivo de preocupación. Sin embargo, si el dolor de cabeza aparece de repente y se asocia a pérdida de conciencia, rigidez de nuca, vómitos, otros síntomas neurológicos o presenta un dolor intenso que dura más de 24 horas, podría deberse a una afección subyacente. Algunas de las causas subyacentes son

Aneurisma intracraneal (una burbuja en la pared de una arteria dentro de la cabeza).
Disección (hemorragia de una arteria que conduce al cerebro).
Accidente cerebrovascular.
Enfermedad coronaria.
Inflamación causada por ciertas infecciones.
Uso de algunos medicamentos, como las píldoras anticonceptivas.

Sin embargo, estas causas subyacentes suelen ser poco frecuentes, ya que la mayoría de las cefaleas sexuales son benignas y no suponen ningún peligro para la persona.

Factores de riesgo y tratamiento

Los hombres tienen entre tres y cuatro veces más probabilidades que las mujeres de sufrir cefaleas sexuales. Esto podría deberse a que los hombres se esfuerzan más que las mujeres durante el acto, pero la razón real no se conoce del todo. Otro factor de riesgo es el bajo nivel de azúcar en sangre, ya que se ha visto que ayuda a sentar las bases para la aparición de dolores de cabeza sexuales. Para muchas personas, su primer dolor de cabeza sexual es también el último, por lo que no hay necesidad de medicación. Para otros, si los dolores de cabeza son intermitentes, se recomienda una evaluación médica para dar el siguiente paso.

Si no se encuentra una causa subyacente para los dolores de cabeza y se producen con la frecuencia suficiente como para interrumpir cualquier tipo de actividad sexual, el médico puede recomendar la toma regular de medicamentos preventivos. Algunos de los medicamentos diarios son los betabloqueantes, que suelen utilizarse para tratar la hipertensión, las enfermedades coronarias y las migrañas. Otros tipos de medicación son la indometacina, un antiinflamatorio, o uno de los triptanes, que funcionan como antimigrañosos. Éstos se toman una hora antes de mantener relaciones sexuales y funcionan como medida preventiva. Algunos cambios en el estilo de vida, como bajar la tensión arterial mediante actividades relajantes como la meditación y reducir el consumo de alcohol, también han demostrado ser útiles. Además, comer alimentos ricos en magnesio como almendras, anacardos, verduras de hoja verde, aguacates y cereales integrales también puede ayudar a evitar estos dolores de cabeza.

Si sufre cefaleas sexuales con frecuencia, es recomendable que visite al médico para descartar cualquier causa subyacente y obtener una opinión experta sobre qué tratamiento funciona mejor en función de las diferencias individuales.