Beneficios menos conocidos del aceite de cannabis para la salud

La hierba Cannabis sativa tiene sus orígenes en Asia Central y se conoce comúnmente como «cannabis» o «marihuana». Esta hierba ha sido utilizada tradicionalmente por muchas culturas para tratar diversos problemas de salud durante muchos siglos. Los productos derivados del cannabis proceden principalmente de las partes de la planta de cannabis que contienen una elevada cantidad de tetrahidrocannabinol (THC). El tetrahidrocannabinol es el cannabinoide comúnmente conocido por sus propiedades psicoactivas, y esta es la razón por la que los productos del cannabis a menudo se enfrentan a una gran controversia y están fuertemente regulados en numerosos países de todo el mundo.

Sin embargo, el cannabis y los productos derivados han recibido un impulso global para su legalización, ya que los productos derivados del cannabis se han introducido en los remedios médicos convencionales. Sigue leyendo para descubrir cómo esta hierba milenaria puede tratar dolencias comunes en el siglo XXI. Durante las últimas décadas, se ha producido un constante impulso mundial para conseguir la legalización de los productos derivados del cannabis y su introducción en los tratamientos médicos convencionales. Entonces, ¿qué beneficios puede aportar esta hierba milenaria y cómo podría utilizarse para tratar dolencias comunes en el siglo XXI?

Alivio del estrés y la ansiedad

Se ha demostrado que un tratamiento con cannabinoides puede ayudar a las personas a aliviarse de experiencias traumáticas o estresantes y a controlar sus respuestas emocionales. Los investigadores han descubierto que los cannabinoides pueden minimizar eficazmente los receptores del estrés en el hipocampo, que es la parte del cerebro responsable de las respuestas emocionales. También se ha descubierto que las terapias con cannabis reducen el estrés y la inquietud en personas que sufrían trastorno de estrés postraumático. Estos resultados demuestran que el aceite de cannabis puede tratar eficazmente los casos de estrés y ansiedad.

Salud del corazón

El aceite de cannabis tiene un rico contenido de antioxidantes que pueden ayudar con dolencias relacionadas con el corazón. Se ha descubierto que el aceite de cannabis puede prevenir ciertas enfermedades cardiovasculares como el infarto de miocardio, el ataque al corazón, la aterosclerosis, etc. Los cannabinoides relajan los vasos sanguíneos y los dilatan, lo que permite mejorar la circulación sanguínea y reducir también la presión arterial.

Alivio del asma

El cannabis ha demostrado su eficacia en el tratamiento de dolencias respiratorias en las culturas tradicionales india y china desde hace miles de años. Esto se debe a sus propiedades antiinflamatorias y efectos analgésicos que pueden dilatar los bronquios y permitir un mejor flujo de oxígeno a los pulmones. Esto hace plausible que el aceite de cannabis actúe como una solución natural para curar el asma en todo el mundo. Durante la década de 1970, se llevaron a cabo varios estudios para investigar los efectos broncodilatadores del cannabis en personas que sufrían de asma en ese momento. Muchas de estas personas mostraron reacciones positivas al tratamiento con cannabis.

Alivio del dolor

Tradicionalmente, la planta de cannabis siempre ha aliviado los estados dolorosos y ha permitido un estado más confortable para la curación de afecciones dolorosas. Este uso se remonta a muchos siglos atrás, pero las nuevas evidencias han demostrado que los productos del cannabis pueden aliviar eficazmente cualquier tipo de dolor y malestar al obstaculizar las transmisiones neuronales en las vías del dolor del cuerpo. El cannabis también tiene el potencial de aliviar las formas más comunes de inflamación y tratar el dolor crónico. Se ha descubierto que esta hierba disminuye significativamente la severidad del dolor y también, mejora los patrones de sueño.

Protección de la piel

Se ha demostrado que la aplicación tópica de aceite de cannabis favorece un aspecto saludable de la piel. El aceite puede eliminar las células viejas de la piel y ayuda al crecimiento de nuevas células para reemplazarlas. También contribuye a la producción de lípidos para combatir enfermedades crónicas de la piel como el acné y la psoriasis. La capacidad del cannabis para reducir el estrés y la ansiedad demuestra que el aceite de cannabis también puede prevenir ciertos brotes en la piel debidos al eczema y la rosácea, que son ciertas afecciones de la piel que se desencadenan debido a condiciones de estrés y ansiedad.

Tratamiento potencial para el cáncer

Una de las enfermedades más controvertidas de la historia de la medicina humana, el cáncer, ha visto en el aceite de cannabis un medicamento potencial para su tratamiento. Se ha descubierto que los cannabinoides tienen una variedad de efectos positivos bajo ciertas condiciones de laboratorio. Pueden desencadenar la muerte de las células cancerosas por apoptosis, impedir la división de las células cancerosas y evitar que los nuevos vasos sanguíneos se conviertan en tumores, así como reducir el riesgo de que las células cancerosas se propaguen por el cuerpo y penetren en los tejidos sanos. Sin embargo, todavía no se reconoce comercialmente como una cura, aunque existen pruebas sólidas de que el aceite de cannabis puede ayudar en el proceso de curación de los pacientes con cáncer.