Beneficios del sexo que pueden aumentar la esperanza de vida

La procreación es una de las necesidades básicas del ser humano y tiene como principal objetivo aumentar la descendencia. Mientras que la reproducción es la forma básica de multiplicar una especie, el sexo es un acto erótico con la misma finalidad. A diferencia de la mayoría de los animales, los humanos han llevado el sexo a un nivel completamente nuevo. Desde la lencería hasta los juguetes sexuales, pasando por la pornografía.

El sexo ofrece mucho más que placer. Puede hacer que parezcas más joven y afectar positivamente a tu vida. Y lo que es más importante, el sexo puede aumentar la esperanza de vida. Una buena razón para practicar sexo. A continuación se mencionan los beneficios para la salud asociados a una vida sexual activa que aumenta la longevidad.

Protege el corazón

El sexo mejora la circulación sanguínea en todo el cuerpo, especialmente hacia el corazón. La actividad sexual frecuente está directamente relacionada con unos vasos sanguíneos y una función cardiaca más sanos. Los investigadores han descubierto que practicar sexo dos o más veces por semana reduce a la mitad el riesgo de sufrir un infarto mortal entre los hombres, en comparación con los que practican sexo menos de una vez al mes. Un corazón sano también tiene un efecto positivo en la prevención de la disfunción eréctil. Los estudios han demostrado que una vida sexual activa está estrechamente relacionada con una mayor esperanza de vida. Un estudio específico descubrió que el sexo puede reducir el riesgo de ataques cardíacos, derrames cerebrales y otras enfermedades del corazón.

Reduce el estrés

La oxitocina, una hormona que se libera durante el orgasmo, ayuda a calmar los nervios. Estudios realizados en ratas de laboratorio han demostrado que la oxitocina revierte los efectos del cortisol, una hormona del estrés. El estrés es una de las principales causas de enfermedades cardiacas y puede acortar nuestra vida de forma brusca. También se ha demostrado que la oxitocina induce el sueño, razón por la cual conseguimos dormir profundamente después de una sesión de sexo satisfactoria. Una buena noche de sueño no sólo reduce el estrés, sino que también aumenta la esperanza de vida.

Reduce el riesgo de cáncer de próstata

El sexo, tanto si se practica en pareja como en solitario, parece reducir el riesgo de desarrollar cáncer de próstata en etapas posteriores de la vida. Investigadores australianos publicaron un estudio en el que se descubrió que una mayor tasa de eyaculación en hombres de entre 20 y 50 años tenía un efecto directo en la reducción de las probabilidades de desarrollar cáncer de próstata.

El estudio señalaba que los hombres de 20 años deberían eyacular al menos una vez al día. Otro estudio similar realizado por el Instituto Nacional del Cáncer demostró que los hombres que eyaculaban al menos cinco veces por semana, ya fuera a través del sexo o de la masturbación, tenían menos probabilidades de desarrollar cáncer de próstata.

Mejora la inmunidad

Una vida sexual activa se traduce en una mejor salud física, y las personas más sanas suelen ser también más felices. Los estudios han demostrado que mantener relaciones sexuales una o dos veces por semana está relacionado con niveles más altos de un anticuerpo llamado inmunoglobulina A, o IgA, que protege de resfriados, gripe y otras infecciones. Un estudio concreto muestra que las personas que mantienen relaciones sexuales al menos dos veces por semana tenían niveles mucho más altos de IgA que las que lo hacían menos de una vez a la semana. La IgA es la primera línea de defensa contra muchas enfermedades infecciosas.

Reduce el riesgo de osteoporosis

La fortaleza de los huesos se deteriora a medida que las personas envejecen. Esto hace que los huesos se debiliten e incluso pueden provocar fracturas frecuentes. La osteoporosis es una enfermedad que afecta a muchas personas mayores y puede reducir su esperanza de vida. La actividad sexual aumenta los niveles de testosterona y estrógenos en el organismo, ambos cruciales para fortalecer los huesos y los músculos. La testosterona está presente tanto en hombres como en mujeres, y la actividad física que conlleva una sesión de sexo al vapor ayuda a mantener unos huesos sanos y fuertes.

Ayuda a perder peso

Una actividad sexual intensa aumenta el flujo sanguíneo por todo el cuerpo y hace que el corazón bombee. El sexo es una forma de ejercicio riguroso y es más divertido que quemar calorías en el gimnasio. Aunque no se quemen tantas calorías, ayuda a perder peso. Según un estudio, un hombre de unos 30 años puede quemar unas 21 kilocalorías durante el coito.

Alivia el dolor

Otro beneficio interesante del sexo es que puede ayudar a superar el dolor. El dolor y el placer se sienten en determinadas partes del cerebro y el sexo es una forma estupenda de olvidarse del dolor. La actividad sexual hace que el cuerpo libere la hormona oxitocina, que ayuda a reducir el dolor. En un experimento realizado con voluntarios que inhalaron vapor de oxitocina y luego se pincharon los dedos con una aguja experimentaron sólo la mitad de dolor que otros que no inhalaron oxitocina.

Eleva el estado de ánimo

El sexo no sólo tiene un efecto beneficioso sobre el cuerpo, sino también sobre la mente humana. Una buena sesión de sexo te hace incondicionalmente feliz, lo que se parece más a la dicha. Esta sensación de felicidad aumentada dura mucho tiempo después de la actividad sexual. Una vida sexual sana conduce a una satisfacción a largo plazo con su salud mental y mejora su capacidad para comunicarse honesta e íntimamente.

Las personas con una vida sexual activa tienen menos probabilidades de sufrir alexitimia, un rasgo de la personalidad caracterizado por la incapacidad de expresar o comprender las emociones. Una vida sexual sana también ayuda a mantener un perfil hormonal saludable, lo que favorece la regularidad de los ciclos menstruales y disminuye los síntomas negativos de la menopausia.

Aumenta la longevidad

El mayor beneficio de una vida sexual activa es, sin duda, el aumento de la esperanza de vida. Las investigaciones demuestran que una vida sexual sana puede añadir entre tres y siete años de vida. También mantiene su piel con un aspecto saludable y le hace parecer y sentirse más joven. En lugar de gastar dinero en productos artificiales que dicen rejuvenecerte, métete en la cama y sigue el camino natural para ralentizar los efectos del envejecimiento.

Una vida sexual activa te mantiene mental y físicamente satisfecho, y numerosos estudios demuestran que las parejas felices viven más. Cuando experimenta un orgasmo, los niveles de la hormona DHEA aumentan en respuesta a la excitación sexual y la eyaculación. La DHEA refuerza el sistema inmunitario, repara los tejidos e incluso actúa como antidepresivo.